Una mañana previa a Navidad el colaborador del periódico británico The Guardian, Leo Benedictus, se levantó y "tras consultar con su cuenta bancaria vio un ingreso de un desconocido por valor de 250.000 libras esterlinas”.
El periodista asegura que aunque “fue un momento excitante” después intentó “encontrar a la mujer cuyo nombre aparecía como el ordenante del ingreso en mi cuenta bancaria y busqué su nombre en Google para localizarla".
Finalmente, el suertudo hombre de prensa habló con su banco y devolvió el dinero a la mujer que por equivocación había depositado los más de $380 mil dólares en su cuenta bancaria.
¿Qué pasaría si recibes un deposito inesperado de US$380.000, lo devolverías?