El debate no solo ha divido a la iglesia y a las autoridades de la Universidad, sino también a la población cuya opinión acerca del tema cada vez causa más controversia entre alumnos, padres de familia, clérigos y académicos.
Por un lado, el cardenal Juan Luis Cipriani ha ratificado que se debe cumplir lo que exige el Vaticano y que se regularicen los estatutos.
Mientras tanto la Federación de Estudiantes de la PUCP ha remitido una carta al Papa Benedicto XVI expresando su rechazo por las reformas estatutarias planteadas, como la que le otorgaría al Gran Canciller la facultad de nombrar al Rector de la Universidad.
Finalmente el ex embajador del Perú en el vaticano ha señalado a un diario local que el caso de la PUCP solo le compete a la santa sede, por lo que las autoridades tendrían que ceder a su pedido.