La policía de Ecuador incautó 3,5 toneladas de cocaína escondidas en una cargamento de yuca que tenía como destino Bélgica. En la operación se detuvo a al chofer que conducía el camión.
Según informaron los agentes, el vehículo fue detenido el fin de semana durante un control rutinario. Con la ayuda de un perro detector de droga, se hallaron 1.700 paquetes ocultos entre el inmenso cargamento de yuca.
Posteriormente, y tras un paciente seguimiento, la policía detuvo a doce personas en una hacienda de la provincia de Los Ríos en donde, presumiblemente, se elaboraba el alcaloide.
Por otro lado, la prensa ecuatoriana informó que dicho cargamente es el más grande decomisado en lo que va del año y que supera a otro hallazgo realizado en enero cuando los agentes encontraron 1,3 toneladas en una isla en Guayaquil.