La Habana.- El gobierno cubano decretó recesos laborales en las provincias de Santiago de Cuba y La Habana para que así la población pueda asistir al recibimiento del Papa Benedicto XVI, quien arribará a la isla el próximo lunes 26 de marzo.
A través de una resolución publicada en el diario oficial del país, se estableció que los centros laborales deberán facilitar la participación de sus trabajadores en el recibimiento del Sumo Pontífice y en las misas que ofrecerá.
El decreto incluye también los permisos para los trabajadores para el 28 de marzo, día en el que el Santo Padre abandonará la isla.
La disposición señala además que “se le abonará el salario básico correspondiente a la parte de la jornada de trabajo que se utilice a ese fin”. Informa la BCC.