A pesar de haber sido una decisión difícil, Amaia Montero confiesa que no se arrepiente de haber abandonado La Oreja de Van Gogh para hacer una carrera como solista y asegura estar “muy satisfecha” con lo que a logrado.
"No me arrepiento; fue una decisión muy pensada, muy meditada y muy importante, como tirarme al vacío", añadió la española quien confiesa que se fue “en un momento alto, no cuando aquello decaía, y tomar una decisión así era muy arriesgado”.
"Yo tomé mi camino y estoy contenta, orgullosa de mi carrera porque me da muchas satisfacciones, pero también fui feliz en mi etapa en La Oreja. Son momentos distintos y tengo grandes recuerdos, los mejores", afirmó la intérprete de Tu Mirada.