Una encuesta realizada por GfK-Conecta revela que el 58,5% de los peruanos rechaza la intervención de la Iglesia en temas políticos, mientras que el trabajo del cardenal Juan Luis Cipriani es reprobado por el 41%, aunque el 49% está conforme con el mismo.
De acuerdo a La República, solo el 12% del nivel socioeconómico más alto considera necesaria la participación de esta institución, situación que es opuesta en el NSE E donde el 42% está de acuerdo con esta iniciativa.
“Por ejemplo, cuando preguntamos si cree que el curso de religión debe ser obligatorio, un alto porcentaje dijo que sí. Eso expresa que se quiere contar en los colegios con una orientación en valores y moral. Pero, cuando se preguntó si considera que la Iglesia debe participar de manera activa en temas de Estado, la gran mayoría contestó que no”, explicó el gerente general de GfK, Hernán Chaparro.
Sin embargo, el 70,3% de los consultados opina que los centros educativos deben ofrecer el curso de religión de manera obligatoria.