Phillip Butters: "¿Quién es Kenji?"

“Aprovecho para decir que no tengo Facebook, ni Twitter, nada de eso. Yo no pierdo el tiempo en lo que no tengo ningún interés o talento”, declara el polémico conductor radial y periodista deportivo, Phillip Butters, en una entrevista concedida para la revista Correo Semanal.

Butters, quien acaba de ser denunciado por homofobia, habla en esta conversación con el periodista Sergio Llerena, sobre sus líos con el MHOL, las propuestas que recibió del fujimorismo para ser candidato al Congreso y para variar, sobre fútbol.

Usted se caracteriza por tener siempre una opinión para todo.
Bueno, trato de opinar sobre lo que yo creo tener determinado conocimiento. Yo he estudiado Administración conozco de leyes, soy empresario, puedo opinar de lo que conozco. De lo que no conozco, pregunto.

El MHOL acaba de entablarle una denuncia penal por homofobia.
Me parece que estamos en un estado de derecho y que ellos pueden hacer lo que mejor les parezca. Ya verán mis abogados si es algo importante.

¿Acaso no le preocupa?
Tengo tal cantidad de preocupaciones realmente trascendentes en mi vida personal o sobre lo que pasa en mi país, que en el punto décimo quinto de mi agenda eso no está.

Usted dijo que ellos, al ir a estas manifestaciones de besos frente a la catedral, estaban provocando.
No, eso lo dijeron ellos. A mí me pareció una falta de respeto. Si yo me burlo de tu fe, eso no es ser provocador, es faltarle el respeto.

Rosa Parks, que en la Norteamérica racista de los años 50 se sentó en la sección del bus para blancos, estaba provocando. La provocación que algunos satanizan, permite romper un status quo abusivo.
Yo sé perfectamente lo que es satánico y es divino. Y si tú quieres ser satánico debes tener los huevos para decirlo. Si tú no crees en Dios y eres anticatólico, hazlo, pero no disfraces tu vocación satánica, con derechos civiles.

Es un tipo que maneja convicciones muy fuertes, ¿no?
A mí me gustan los hechos antes que las palabras, por eso soy un tipo pragmático. No me gustan los “floreadores” y uno predica con el ejemplo.

¿Y para quién predica?
Predicar con el ejemplo es un decir. Yo no predico, yo doy mi opinión, no soy activista de nada. El que me quiere creer, que me crea. Yo no me creo ese cuento de liderar la opinión.

¿Acaso no le seduce ser un líder de opinión?
No, en absoluto. Yo soy recontra popular, más popular que cualquier líder de opinión, pero no creo que porque diga algo voy a cambiar la manera de pensar o sentir de la gente. Yo no voy a hacer que alguien de derecha sea de izquierda, que alguien odie a Fujimori o a Humala, lo quiera.

Querer cambiar la opinión del otro ha estado pasando mucho últimamente, ¿no?
Claro, y yo me mato de risa de los líderes de opinión. El triunfo de Keiko y Humala en primera vuelta es una cachetada a los líderes de opinión, a los medios de comunicación, a aquellos que creen que saben.

¿Descarta cualquier interés en la política, porque sabemos que lo han tentado?
Por supuesto. A mí me ofrecieron el número 5 en la lista al Congreso de Keiko y yo hubiera sacado más votos que Kenji, sin ninguna duda.

¿Está seguro, Phillip?
Absolutamente. Yo no me iba a mi casa sin medio millón de votos de ninguna manera. Mira, subía al último piso de un edificio en La Colmena y me aventaba si Kenji sacaba más votos que yo.

¿Pero por qué está tan seguro?
Kenji no puede articular una sola frase y ha sacado votos por su papá, porque la gente quiere al “Chino”. Pero a mí la gente me quiere más que a Kenji y el voto es emocional. ¡¿Quién es Kenji?! Él es “el hijo de”. Yo soy yo, soy Phillip Butters.

¿Y por qué no aceptó la oferta de Keiko Fujimori?
Por la misma razón por la que no acepté ir con Castañeda o con el APRA: porque yo tengo un proyecto de vida que implica independencia. Independencia de criterio e independencia económica: a mí no me alcanza el sueldo de un congresista y no soy ladrón.

¿Siempre soñó con ser popular?
Yo no sueño. Yo sabía que iba a pasar porque he chambeado para eso. Yo soy bisnieto de senador, nieto de alcalde. En este país hay calles y plazas con los nombres de mi familia y nunca nos han acusado de ser ladrones. Mi mujer apellida Vizcardo, de los Vizcardo y Guzmán, próceres de la independencia americana.

Vayámonos al fútbol.
O sea quieres llorar.

No, pero me parece que al peruano cada vez le importa menos el fútbol local.
Bueno, ahora la Champions todo el mundo la sigue y ves la enorme diferencia entre el “julbo” peruano y el fútbol internacional. Hemos visto hace poco al Barcelona de Messi, uno de los cinco mejores equipos en la historia del fútbol mientras que en el Perú se está jugando el torneo intermedio. ¡Eso es un insulto al ojo! No es lo mismo Phillip Butters calato que Brad Pitt calato, yo no puedo salir calato a la calle y el fútbol peruano sale a la calle calato.

¿Pero cómo ve lo de la Copa América? Porque el fútbol peruano va a estar ahí, aunque no merezca seguir existiendo.
Va a ser una letanía, un sufrimiento por este proceso de “Burgarián”. Markarián ha venido a engañarnos.

Le parece. ¿Por qué?
No me parece, en el fútbol yo ya no opino, ahí sí pontifico. Es una estafa lo que estamos viendo.

Pero Sergio Markarián es un técnico exitoso.
Markarián ha venido pensando en encontrar una realidad y ha encontrado otra. Los jugadores no quieren a Burga, no quieren entrar en la selección. Pizarro ha jugado un solo partido desde que Markarián ha venido, Rodríguez no ha jugado ni uno. Ya pues, ¿qué te está diciendo eso? ¡El Loco “Vargas” está de vacaciones!

¿Está diciendo que no quieren a Markarián?
No quieren a la selección peruana, les interesa un carajo. Los jugadores de ahora paran lesionados, tiene “miedo escénico”, que es una nueva forma de decirle cobarde al cobarde. ¡Tienen bajo el umbral del dolor! Hay mejores maneras de decirle a alguien cagón. El cagón es cagón, el valiente es valiente, no me cambien las cosas.

Me parece que estos conceptos los proyecta a otras cosas fuera del fútbol.
El que es un cagón en el fútbol, es cagón para todo en su vida. En el fútbol los hombres viven llorando todo el tiempo, eso me jode. En los campeonatos juveniles siempre terminan llorando. No llores como mujer lo que no has podido defender como hombre.

Bueno, los hombres también lloramos pues, Phillip.
No, hermano. Llora el día que muera tu madre, no porque pierdes un partido de fútbol porque eres una cagada como jugador. La sociedad tiene que admirar a sus héroes y condenar a sus cobardes. El Perú es el país de la amnistía, del perdón, de la segunda oportunidad.

¿Quién le cae bien en este país?
¿Admirable? Muchísima gente. El otro día estuve en Ciudad Pachacútec y hay gente que camina 20 cuadras para baldear, esa gente es admirable. Gente que ha salido de abajo. Dina Páucar, su historia es fabulosa. La historia de Gastón es de puta madre, la historia de Antonio Camayo, el dueño de Iza Motors, de los Añaños, esas son historias fabulosas.

¿Y su historia?
Yo no. Yo aún no tengo una historia que contar (Con información de la web La Mula).