Sábado 04 de mayo 2024 | Contáctenos
Una entrevista es una excelente forma empezar un domingo, más aún el primer domingo del año 2012. En esta ocasión Óscar Miranda conversó con Patricia del Río Labarthe, flamante columnista de La República y presentadora de noticias de ATV.
–¿Te molesta que te digan caviar?
–No, no, para nada. Nunca me ha molestado que me lo digan.
–¿Y te lo dicen mucho?
–Ay, me lo dicen todo el día.
–¿Y eres caviar?
–Pero ¿qué cosa es ser caviar?
–No sé, pensé que me ayudarías a saberlo.
–Yo siempre he dicho que soy una caviar a la que le falta la 4x4, la casa en la playa...
Así empieza la charla, que también atraviesa momentos en donde se toca la situación de la prensa en el país:
-¿Por qué crees que el Grupo El Comercio sacó a Laura Puertas?
–En campaña no pudieron sacar a Laura Puertas, ya sacar a Patricia Montero había sido demasiado complejo, y aguantaron un tiempo más hasta que pensaron que ya estaban en condiciones... Creo que la relación se deterioró tanto después de la campaña que ya se volvió insostenible mantenerla, responde Del Río.
Casi al final de la entrevista, la periodista da su opinión sobre el presidente de la República y la alcaldesa de Lima, personajes que sufren las inclemencias de un país y una ciudad que buscan respuestas. Aunque Humala con poco tiempo en el cargo, el caso de Villarán es diferente:
–¿Cómo ves a Humala al cabo de estos cinco meses de gobierno?
–¿Tú lo ves?
–Lo veo poco.
–Yo no lo veo (risas). ¿Dónde está? Si bien no creo en regímenes personalistas, Humala no puede desaparecer de esa forma cuando el Perú está en un momento en el que necesita definiciones.
–¿Y qué piensas de Susana Villarán?
–Si Humala parece que está jugando a las escondidas, Susana juega a la gallinita ciega (risas). ¿Te acuerdas de la gallinita ciega que daba vueltas y vueltas y no sabía para dónde iba.
–O sea que el Perú es un patio de juegos.
–(Risas). Susana no encontró el rumbo, y no lo encontró en un montón de niveles. No tiene un perfil claro. Siempre parece que fuera una activista y que estuviera dirigiendo una ONG. No puede insistir con ese estilo de perfil bajo, de “yo no pongo carteles en mis obras”, “hago lo que estoy haciendo porque lo tengo que hacer”, porque no le está funcionando, la va a llevar a la vacancia, y ella tiene la obligación, por la gente que la eligió, de evitar la vacancia (Con información de la revista Domingo y el diario La República).
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