Britney Spears demandó a "Factor X" que su acuerdo salarial fuera superior a los ingresos de Jennifer López para "American Idol".
La cantante de "Toxic" finalmente acordó un pago de $ 15 millones de dólares para una temporada de la versión del programa para los EE.UU., $ 3 millones más que la cantante de "On The Floor" en su primera temporada en el programa rival.
Se cree que los jefes de "Factor X" estaban tan desesperados por firmar con Britney para la segunda temporada del reality, que le dieron permiso para hacer lo que quisiera, cosa que así fue en su primera grabación del show en Austin, Texas, cuando ella salió durante cuatro audiciones, según publica ctv.ca.
Una fuente dijo:"Simon Cowell es un empresario inteligente y sagaz que sabía que Britney podría hacer su show y estaba dispuesto a darle cualquier cosa para subirla a bordo - y lo hizo".