Sábado 04 de mayo 2024 | Contáctenos
Cuarenta años después del primer Día Mundial del Medio Ambiente, y 20 años después de la original 'Cumbre de la Tierra’, Brasil sigue siendo un punto de inflamación de la política ambiental.
La reunión comienza el hoy 5 de junio con la 40 ª celebración anual del Día Mundial del Medio Ambiente, iniciada en 1972 por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Brasil es el país oficial que da acogida a la celebración. No es casualidad que Brasil está organizando otra gran Cumbre de la Tierra de las Naciones Unidas a finales de este mes, llamada "Río +20".
Y ahora, cuando Brasil acoge con beneplácito estas celebraciones, su gobierno está luchando con la legislación que los críticos dicen que podría enjugar parte de su éxito en la Amazonía. El Congreso de Brasil aprobó una ley forestal en abril, bajo la presión de la industria de la agricultura, que otorgaría una amnistía para desmontes ilegales y debilitar una serie de regulaciones ambientales. Entre otros cambios, el proyecto de ley permitiría una mayor deforestación cerca de los ríos, reducir las protecciones de árboles en terrenos en pendiente, y dejar que los propietarios de tierras amazónicas dejen de cumplir con los requisitos de la cubierta forestal, cortando los árboles exóticos como el del aceite de palma o de otras tierras boscosas que poseen en otros lugares.
Marcio Astrini, representante de Greenpeace, calificó al Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff como "el peor" que ha tenido Brasil para el medio ambiente desde la llegada de la democracia en 1985 y la acusó de ser "coautora" de la aprobación de esa ley, que, a su juicio, "hace muy fácil la vida de quien quiere desforestar".
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