El primer ministro, Óscar Valdés, criticó el comportamiento de ciertos grupos violentistas que “amedrentaron”, al monseñor Miguel Cabrejos y el padre Gastón Garatea mientras se realizaba la reunión en Cajamarca con autoridades de esta ciudad que se oponen al proyecto Conga.
“Todavía no tengo el informe de la comitiva religiosa pero su trabajo va a ayudar mucho a la solución del problema en Cajamarca. Sin embargo, no puede ser que se repita con los facilitadores la escena que vivimos en la reunión del 11 de diciembre. Esto por gente violenta que trata de atemorizar y amedrentar”, señaló Valdés.
El premier sostuvo que la Policía no intervino para evitar que la crisis que se vive en esta ciudad, se aumente aún más. “Si queremos la paz y el diálogo comportémonos como gente pacífica. Nosotros tenemos una Constitución, leyes, y pensamos que el Gobierno quiere el diálogo, (pero) también estamos en la obligación de hacer respetar el estado de derecho”, precisó.
Cuestionó, asimismo, que un sector antiminero pida nuevamente un referéndum sobre esa inversión minera con el argumento de temas medioambientales, y añadió que las dudas ya han sido aclaradas mediante el peritaje internacional que encargó el Gobierno.
“Se dijo que no había agua para Cajamarca, que (se afectaría a) las cabeceras de cuenca, que las aguas subterráneas (…) Todo eso se ha aclarado, y ahora pretenden un referéndum, ¿por qué?”, preguntó.