La niñera peruana Ada Cuadros de 33 años de edad, fue sentenciada a cadena perpetua por un Tribunal Supremo de Texas, tras encontrarla culpable por la muerte en el 2005 de Kyle Lazarchik, un niño de 14 meses de edad que tenía a su cargo.
La sentencia se dio en un segundo juicio a cargo de un tribunal del condado de Collin (Texas), luego de que el Quinto Juzgado de Apelaciones de Dallas revocó en el 2009 el primer fallo condenatorio, con la misma pena, que recibió en el 2006.
Los médicos certificaron que el pequeño fue diagnostica con muerte cerebral a causa de lesiones graves en la cabeza.
Cuadros, encarcelada desde el 2005 ha reiterado su inocencia y ha sostenido que el niño se golpeó la cabeza accidentalmente en el marco de una puerta y que luego empezó a vomitar, dejó de respirar y murió.