Un gran número de soldados asaltó este sábado una localidad sureña de Siria en los momentos en que observadores de la ONU acudían a la zona de Treimsa donde el ejército sirio asesinó a 150 personas en un ataque realizado el jueves pasado.
De esta manera, la portavoz de los observadores Sausan Ghosheh informó que unos observadores habían ido a la golpeada zona, mientras que un militante opositor de Hama, Abu Ghazi dijo que el grupo se logró entrevistar con habitantes en el lugar de la matanza e "inspeccionó los lugares que fueron bombardeados".
Cabe indicar que el régimen sirio afirmó haber llevado a cabo una "operación de calidad" en Treimsa que culminó con la "destrucción de guaridas de grupos terroristas, sin que hubiera que lamentar ninguna víctima civil".
Las fuerzas sirias tendrían decidido terminar con los bastiones rebeldes, en especial en la localidad de Deraa, la cual es la cuna de la movilización contra el presidente Bachar Al Assad que fue lanzada hace más de un año.