El conocido músico británico, Paul McCartney, rompió su silencio y desafió a varios de sus detractores al asegurar que Yoko Ono, la expareja sentimental de John Lennon, no es la responsable de la desintegración del famoso grupo The Beatles.
“Ella (Ono) ciertamente no rompió el grupo. Yo no creo que se la puede culpar de nada”, dijo el también empresario durante una entrevista a un conocido medio internacional.
Así, McCartney contradice la creencia general que pone a la viuda de Lennon como la mala de la película, admitiendo además la influencia de la fémina en la vida y carrera del polémico artista.
“Cuando Yoko llegó, parte de su atractivo fue su lado vanguardista, su visión de las cosas. Ella le mostró otra manera de ser, una que fue muy atractiva para él. Así que fue el momento para que John se fuera”, opinó el europeo, de acuerdo a la BBC.