Mitch Winehouse, padre de la desaparecida cantante británica Amy Winehouse, reveló que dos de los vestidos de novia de su hija fueron robados de su residencia en Londres.
Uno de los trajes es el que la fémina lució en su boda con Blake Fielder en Miami en el 2007, mientras que el otro lo estrenó en una entrevista para la BBC, hecho en base a un modelo cóctel con estampado de periódicos.
“Es un golpe muy duro. Me parece enfermizo que alguien pueda robar algo que sabe que tiene este tremendo valor sentimental”, dijo don Mitch con tono triste al periódico The Sun.
Las prendas iban a ser subastadas e Nueva York para recaudar fondos destinados a la organización benéfica de la familia, “The Amy Winehouse Foundation”.
Esta entidad se encarga de ayudar a niños de escasos recursos económicos y ofrece asesoría a drogadictos para su recuperación.
Los Winehouse estimaban obtener por la venta unos 162 mil euros.