Aunque parezca salido de un cuento de ficción, Kosik es un elefante asiático que aprendió a hablar cinco palabras en coreano.
Proveniente del zoológico de Corea del Sur, su entrenador de 22 años le enseñó a hablar al cuadrípedo por sonidos, tono a tono desde que tenía 14 años.
La investigadora y experta en comunicación, Angela Stoeger, dijo que “habla con voz humana y tiene dos aspectos importantes, tono y timbre”.
Agregó que “esto es notable considerando las diferencias anatómicas entre un elefante y un ser humano”.