Susana Villarán me recibe en su despacho. No se le ve angustiada aunque sí muy ocupada y muy sobre el caballo de las reformas que tercamente quiere para la ciudad. Asume que se enfrentará a una gran campaña pero que saldrá adelante, como otras veces, de este momento difícil. Está lista para la pelea, aunque sabe que no todos a su alrededor comparten su fortaleza y optimismo. Sobre las contingencias que le toca enfrentar conversamos el último viernes por la tarde.
-La revocatoria es en 5 meses. ¿Cómo va a organizar su tiempo entre la municipalidad y una campaña?
La revocatoria ha sido convocada para el 17 de marzo. El día tiene 24 horas. No tiene más ni tiene menos. Seguiremos trabajando denodadamente por hacer que Lima no pare. En estos momentos Lima está teniendo ya una inversión privada de 1.200 millones de dólares, la más grande de los últimos tiempos en infraestructura vial. Estamos ejecutando 200 millones de soles en muros y en escaleras en las zonas más vulnerables donde viven los más pobres de nuestra ciudad. 360 millones en parques zonales donde no solamente va a haber la piscina y la canchita, sino están construyéndose –algunos ya inaugurados– sitios para hacer deportes de todo tipo. Pero, además, centros culturales, parques temáticos... cinco parques más en lugares donde los niños, los adolescentes, no tenían a donde ir y por eso estaban en las calles. Es decir, Lima en este momento tiene la posibilidad de hacer obras concretas que la gente quiere, que la gente ve, que la gente puede tocar, y obras que la gente va a sentir como suyas. Porque, por ejemplo, en la Escuela Deportiva Municipal, tenemos 80 mil personas que hacen todos los deportes en los parques zonales o Chicos y Chicas Chamba, 22 mil muchachos rescatados de las pandillas. Eso lo saben los padres y madres de las zonas más tugurizadas del centro de la ciudad, pero también en los asentamientos humanos saben que es una ventaja no pagar a un centro técnico productivo, ni la matricula ni la pensión, y que su hijo o su hija entre 15 y 25 años tenga un oficio. Esas cosas no pueden parar, Rosa María, y no van a parar. Y esa es la manera de enfrentar la revocatoria. ¿Cómo la voy a enfrentar personalmente? Con espíritu democrático. Esta es una democracia por la que yo he luchado contra Sendero y contra todas las fuerzas oscuras. La revocatoria es un mecanismo democrático. Ahora, te lo digo con toda sinceridad, yo no creo que ese espíritu democrático sea el que habita en los corazones de los que han promovido la revocatoria.
-¿Le sorprendió que al final se lograra?
Me sorprendió que el JNE diera el paso en falso que ha dado. Realmente no era ese el JNE que rescatamos nosotros para la democracia.
-¿Es injusta la decisión?
Completamente. Y no solamente injusta... Yo diría que no es legal.
- Confiep ha salido a defender su gestión señalando que hay millones de dólares en juego en inversión privada, y sobre todo en megaproyectos para la ciudad que ya están en ejecución, o van a estar ejecutados muy pronto. ¿Le sorprende que la Confiep salga a defender la gestión de Susana Villarán?
Mira, me alegra. Me alegra muchísimo porque siempre lo dije, y creo que no se entendió, o no se quiso creer. Vivimos de prejuicios, entonces Susana Villarán es 'la caperucita roja'. No. Susana Villarán es una mujer que siempre ha creído que la inversión privada y la inversión pública tienen que darse la mano para construir una mejor sociedad. Para hacer inversiones que beneficien a nuestra ciudad y nuestro país. Y en la última reunión que tuvimos con AFIN, ellos estuvieron sumamente contentos. Expresaron su respaldo a esta gestión, que ha logrado en menos de 2 años esta inversión de 1.200 y 3 mil millones de dólares en infraestructura que tienen que ver con el túnel de San Francisco, que tienen que ver con nuestro gran Centro de Convenciones que Lima necesita y requiere para hacerla competitiva. La ampliación de la Vía Expresa, y una serie de otras obras importantísimas, como Vías Nuevas de Lima, la Panamericana, Javier Prado, en fin. Son muchísimas las obras de carácter vial, pero también aquellas de carácter público. Por ejemplo, Odebrecht, que gana bien, como debe ser, las obras de las Vías Nuevas de Lima, Panamericana Norte, accesos y salidas, Panamericana Sur, y Prialé con 19 km más. Hemos negociado con ellos de tal manera que esa inversión privada no sirva solo para el automóvil particular y para el transporte de carga, que pagan peaje. En los costados estarán los corredores segregados para el transporte público por donde pasa el 80% de la gente. Y eso es lo que nosotros queremos en este momento. Entonces, sí, me alegra profundamente que se den cuenta de que nosotros estamos a favor de la inversión privada para el bienestar de la ciudad y para la competitividad e inclusión social. Las dos tienen que ir de la mano.
-Marco Tulio Gutiérrez dice que él no gestiona la revocatoria porque usted sea deshonesta sino por ineficiencia, porque no ha hecho nada... ¿Qué hay detrás de eso?
Yo he venido, hemos venido... Nos hemos comprometido desde el primer momento a hacer grandes reformas para esta ciudad. Eso es lo central. Reformas que han estado postergadas por décadas. Reformas que requieren de tiempo, que no se hacen de la noche a la mañana. Por eso yo entiendo a veces la impaciencia, pero la reforma del transporte, cuando al final del 2013 todos viajemos –porque yo viajo en transporte público, siempre lo he hecho– en unos buses azulinos que van a tener paraderos fijos, horarios fijos, corredores segregados, el número de la línea, uno detrás de otro sin congestión, sin contaminación, sin accidentes de tránsito, sin el caos que hoy tenemos, será entendida. Ya hemos avanzado los 7 pasos de la reforma con 9 paros. Y seguimos avanzando.
-En enero se licitan los corredores. Si a usted la revocaran en marzo, ¿ese proceso se pararía?
No se pararía. Y lo podemos asegurar, tendrán la seguridad jurídica de 10 años porque habrán cumplido con ser empresas constituidas, trabajadores en planilla, consorcios empresariales, sin el sistema comisionista afiliador que tenemos hoy día que es 'la guerra del boleto' y del 'sálvese quien pueda', y 'mátese quien pueda'.
-El otro tema es La Parada.
44 años. ¿Sabes qué? 44 años después varios han puesto su grano de arena, pero no se tomó la decisión político-administrativa. La tomamos nosotros, la tomé yo. Y yo no me quiero ganar indulgencias con Avemarías ajenas, pero tampoco voy a dejar de decir que esta decisión la tomé yo. ¿Sí? Yo creo que las políticas públicas acumulan políticas de Estado, yo creo en esa manera de ver las cosas. Pero, ¿sabes qué? La Parada ya no es el mercado mayorista. Se acabó. Hay un antes y hay un después. Pero también, como eso, está Barrio Mío. Barrio Mío es realmente algo extraordinario. Algo que no va a parar, porque como los proyectos de inversión pública duran –en el mejor de los casos– 12 meses y medio entre la viabilidad y todo, bueno, ahora en diciembre empiezan a construirse los muros en los 600 asentamientos humanos de mayor riesgo de nuestra ciudad. Eso no lo para nadie, porque ahí están comprometidas las organizaciones sociales capacitadas frente a cualquier problema que pudiese haber en caso de sismo. Entonces te digo, son obras que no pueden parar.
- En las encuestas de aceptación de su mandato, el apoyo más alto lo tiene en el sector AB. En cambio, en los sectores D y E, en donde se ha dedicado más su gestión, es donde menos apoyo tiene. ¿Por qué? ¿Cómo se explica ese fenómeno?
Porque hay proyectos como el de la reforma del transporte que no dan resultados inmediatos, pero que van a darles resultados y les va a servir muchísimo al 80% de limeños y limeñas. Las personas más pobres gastan el 29% de sus ingresos en el transporte. Ese transporte pésimo, caótico, que les demora 4 horas, que les quita el tiempo para vivir, ese transporte, va a cambiar. Todavía no lo sienten, pero el día que lo sientan, yo creo que va a cambiar su percepción. Y yo entiendo su impaciencia y me hago cargo de su impaciencia, y sé qué les duele, y quisieran ver más cosas. Pero ahora, cuando vean los muros, cuando vean todos los accesos, todo eso va a ir poco a poco. Las familias de Barrio Mío, las familias de Chicas y Chicos Chamba, las familias que son atendidas en el Warmi Wasi, en la Casa de la Libertad, las mujeres víctimas de violencia... Todas ellas están sintiendo poco a poco que en esos sectores está nuestra principal inversión. Solo Barrio Mío es un millón y medio de personas beneficiadas. Ese programa empieza en enero y termina en diciembre.
- ¿Va a estar en medio de la campaña?
En medio, sí.
- En el tema de La Parada es difícil de creer que la Municipalidad no sabía ni el día ni la hora del primer operativo, y que por eso usted había pedido unas vacaciones de 5 días para firmar unos documentos con sus hijos. Esto la agarró completamente de sorpresa. ¿Fue así?
A ver, yo quisiera aprovechar que me das esta oportunidad para decir lo siguiente. Nosotros hemos pedido apoyo a la Policía Nacional, y eso consta en las cartas del Gerente Municipal al Jefe de la Sétima Región, Aldo Miranda, a quien públicamente quiero darle las gracias porque nunca nos dio la espalda. En todos los paros, en cerrar El Hueco, en todos los operativos que hemos tenido para limpiar las calles de la prostitución ilegal, de todo aquello, siempre ha estado nuestro Jefe de la Sétima Región, en el Comité Regional de Seguridad Ciudadana a nuestro lado, como debe ser. Ha sido el mejor de los generales que hemos tenido. Me da una pena inmensa que se tenga que ir, de esta manera además, de verdad, lo digo. Pero, ¿que ha habido cartas diciendo “nosotros necesitamos apoyo policial”?, sí; ¿que ha habido llamadas de mi parte al Ministro del Interior?, sí; ¿que el 15 de setiembre lo conversamos con el propio presidente de la República?, sí. Y en los diferentes temas que hemos trabajado esa tarde con el presidente Humala, hemos tocado el tema de la necesidad de que se abra por fin el mercado de Santa Anita. Y el presidente me ha dicho: “Nosotros la vamos a apoyar”. Y le dijo a Juan Jiménez: “Que la alcaldesa y el ministro del Interior trabajen juntos en esto”. Así que yo he llamado varias veces al ministro del Interior, varias veces al general Aldo Miranda, y han coordinado con Gabriel Prado, pero, ¿qué pasó? Detuvieron el operativo por la cumbre de los países árabes, luego por la visita de la Secretaria de Estado de Estados Unidos y de Michelle Bachelet. Momentos en que han tenido que concentrar fuerzas policiales y no han tenido la cantidad suficiente de efectivos para hacerlo. Y yo he insistido pero jamás presionado, porque yo no puedo presionar a quien es dueño por completo de la operación policial. Una cosa es la decisión político-administrativa, otra cosa es la operación policial. ¿Que yo no sabía el día y la hora? No. El día y la hora los decidía el Jefe de Operaciones, y el Jefe de Operaciones no es el general Aldo Miranda, es el general Gamarra, que es el que firma la operación.
-¿Y a él no lo ha relevado del cargo?
Creo que no.
-El sábado ya está usted acá de regreso, ¿y ahí sí sabía del operativo?
Supe de los hechos inmediatamente cuando llegué a Nueva York. Inmediatamente me comuniqué, inmediatamente estuve a cargo. Porque uno ahora puede estar a cargo, estando físicamente acá o estando allá. Y he dado declaraciones desde el día siguiente muy temprano en la mañana. Acá eran las 6, pero para mí eran las 5 de la mañana. Yo no he dormido. Ni bien llegue a mí me han dicho “hay dos muertos y hay cientos de heridos”. ¿Y tú te puedes imaginar cómo me he sentido? ¿De no poder regresarme si no hasta esa noche? ¿De estar allá? Pero he estado al tanto, y al comando de la parte política y administrativa. Y he asumido mi responsabilidad política y administrativa desde el primer momento. Porque yo creo que cuando uno le pide a la Policía algo así, no solamente la apoya, sino también asume su responsabilidad.
-En La Parada, no hay vuelta atrás. ¿Se va a construir un parque ahí?
El Parque del Migrante.
-Una de las cosas que han dicho contra usted es que le quería entregar la zona a un supermercado chileno.
No. No tengo nada contra los chilenos, contra los argentinos ni contra los bolivianos. Nada. Pero eso será el Parque del Migrante. Se llama La Parada porque ahí han llegado los emprendedores de todas las zonas del centro de nuestro país fundamentalmente, y de toda la Amazonía también, no solamente los Andes. Ellos han hecho Lima. No se llama La Parada por el mercado, sino porque ahí paraban los buses. Entonces, queremos hacer ese homenaje al migrante, y queremos generar en esas 3 hectáreas un espacio verde, porque ahí está San Cosme. Ahí donde hubo la mugre, informalidad, el caos, queremos un espacio verde. Y hemos dicho que vamos a hacer un complejo policial en una parte, de manera que la Policía pueda terminar de pacificar, y que podamos tener también trabajos preventivos para los adolescentes y jóvenes. Hay un lindo proyecto. Pero en este momento y ya salió el Decreto de Alcaldía para ingresar preventivamente por razones de salubridad pública y proceder a la fumigación y selle de la zona para que no se genere una emergencia sanitaria. Hay que sellar esa zona porque hay millones de ratas.
-Sellar la zona y entrar con un trabajo de fumigación es complicado...
Hay que sellar, fumigar y rescatar por completo. Derruir todo lo que hay. Y emprender todo el trabajo del parque. Espero que esté terminado lo más pronto posible.
“SE ESTÁ CONSTITUYENDO UN FRENTE AMPLIO DE GENTE QUE NO CREE EN LAS INTENCIONES DE LOS REVOCADORES”
-En el tema político, lo que dice la lógica política es que en una campaña usted busque aliados políticos. Sus aliados naturales deberían ser los miembros del PPC que están en el Consejo, que también se exponen a la revocatoria. Tanto Luis Bedoya, Lourdes Flores, como Raúl Castro, han dicho que institucionalmente el PPC está en contra de la revocatoria. ¿Va a aprovechar esa oferta política?
En estos días, Rosa María, he recibido no solamente expresiones públicas de personas como Luis Bedoya Reyes, Lourdes Flores y Raúl Castro en el PPC, que son la primera minoría, además de una minoría muy importante en el Consejo que ha estado con nosotros en todos las grandes temas de la ciudad, eso hay que decirlo, sino de muchísima gente demócrata que no votó por mí, que no simpatiza necesariamente conmigo, pero que está absolutamente en contra de lo que puede significar la parálisis de la ciudad de Lima por un lado, y un golpe a la democracia por el otro. Son dos expresiones que yo he recibido de esta manera. Así que se está constituyendo, yo creo, un frente bastante amplio.
-No un frente de izquierda...
No. Es un frente democrático, amplio, variopinto, de muchísima gente que no cree en las intenciones de aquellos que promueven esta revocatoria.
-¿Vamos a verla pronto visitando el PPC, el APRA, el nacionalismo?
A don Armando Villanueva, al primero, al que visito además sin que haya tenido que decir nada. Cuando me entero de que está mal, voy y lo visito y converso con él... Es una gran persona. He aprendido muchísimo de él en este tiempo. Nos hemos hecho buenos amigos. A Lucho Bedoya, a quien frecuento, es muy amigo de mi tío Gonzalo, uno de los fundadores del PPC, el único hermano vivo de mi madre. A todos ellos los volveré no solamente a visitar, sino a agradecer y decirles: “Señores, todos juntos saquemos adelante este proceso”.
-¿A pesar de que ha habido discrepancias públicas en el Consejo esta semana?
Pero eso es normal. Eso es parte de la conducta política. La gente se te pone eufórica, se calientan las cabezas, en fin. A mí me parece que es una anécdota. No hay que quedarnos en eso.
-¿Este gran frente se constituiría para hacer campaña?
Sí, por supuesto. Yo no voy a hacer la campaña con recursos públicos, pero sí voy a inaugurar obras. Y nada me lo impide, al contrario, la gente lo reclama. Pero sí te digo que la consulta va a definir esta división: quienes están a favor de la ciudad o quienes están en contra de la ciudad, porque quieren que se paralice durante dos años. La consulta es un parte aguas también (Hecha por Rosa María Palacios para el diario La República).