El FBI sabía desde el verano pasado que el general David Petraus sostenía una relación extraconyugal

El general David Petraus es sus momentos de gloria

A medida que pasan las horas y los días, nuevas revelaciones añaden “leña al fuego” del escándalo en medio del cual el director de la CIA, el galardonado general David Petraus, renunció este viernes 9 de noviembre, admitiendo que había sostenido una relación extraconyugal con quien era su biógrafa autorizada, la ex militar Paula Broadwell.

Una de ellas concierne al hecho de que el FBI y el Departamento de Justicia tenían conocimiento desde el pasado verano que agentes - FBI habían descubierto que el general Petraus sostenía una relación extraconyugal. Una relación que se habría iniciado poco tiempo después de que Petraus asumió el cargo de director de la CIA hasta hace cuatro meses, según señala Steve Boylan, quien fue portavoz del ex hombre fuerte de la inteligencia norteamericana en Irak.

El hecho de que el FBI tenía conocimiento del hecho, no está demás decir, causa gran revuelo y encendido los ánimos en los corrillos del poder en Washington. Al punto que desde el Senado, la presidente de la Comisión de Inteligencia, la demócrata Dianne Feinstein, señaló que su comité pedirá sin ninguna duda explicaciones. Una investigación del FBI que involucra al director de la CIA “podía tener consecuencias sobre la seguridad nacional”, señaló la senadora en entrevista para la cadena FOX. “Creo que el FBI debió dar a conocer lo que estaba haciendo”, sentenció Feinstein.

Es el caso también del congresista por el Partido Republicano Peter T. King de Nueva York, miembro del Comité de Seguridad Interior, dijo que “el FBI tenía la obligación absoluta de decírselo al presidente” que una investigación involucra del director de la CIA. Ante estos alegatos, la agencia de investigación federal puntualizó que hasta la semana pasada la investigación estaba incompleta y que no había certeza sobre las implicancias sobre la seguridad interna de la relación extraconyugal del general Petraus.

Esto, sin duda, debido al extremo cuidado que pone el FBI en los casos que conciernen los asuntos íntimos de los investigados, en aras de evitar los excesos cometidos en la llamada era de Edgard Hoover, cuando información sobre la vida sexual de los investigados era obtenida indebidamente, quién sabe con qué objetivos.

Como se ve, la renuncia del general cuatro estrellas David Petraus dará aun que hablar.