El Ministerio de Defensa de Rusia, informó que en el 2013 reanudará sus actividades para el desarrollo de un láser de combate tras una pausa de dos años. El desarrollo es este láser le fue encargado a tres empresas domésticas.
El Láser tendrá la capacidad de destruir aviones, satélites y misiles balísticos que amenacen el espacio aéreo ruso.
También se dio a conocer que a diferencia del dispositivo Láser anterior, 1LK222 (Sokol-Eshelon), cuya función era inutilizar provisionalmente los sistemas ópticos de satélites orbitales, el nuevo podrá “quemar al enemigo con emisiones de alta energía térmica”.
Además, las empresas que desarrollaron el 1LK222, Jimpromavtomatika (Vorónezh) y Almaz-Antey (Moscú), nunca dejaron de experimentar con diversos componentes y sistemas del láser, así que su versión terrestre está prácticamente lista.
Lo que si todavía se desconoce es cuál será el futuro vehículo del nuevo láser, si un avión de transporte o un bombardero.
Como se recuerda, en 1991, Rusia llevaba cierto adelanto a EEUU en dicha materia y el actual retraso. Años después, EEUU venía desarrollando un láser de combate a bordo del avión Boeing 747-400F pero en 2011 canceló el proyecto por ser muy costoso e inviable.