El abogado francés que defiende los intereses del Estado peruano ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, Alain Pellet, aseguró que el Gobierno de Chile pretende demostrar “con contorsiones” que sí hay una línea fronteriza marítima entre ambos, en base al acuerdo rubricado en el año 1952.
“Chile, en lugar de reconocer la evidencia de que se carece de una delimitación marítima entre las partes, se ha empeñado en demostrar a través de contorsiones que sí se aprobó una línea fronteriza en 1952. Este trato singular que Chile hace sufrir al derecho convencional se manifiesta por la forma insólita en que entienden ha de aplicarse el Tratado de Lima de 1929 y el informe final de 1930”, explicó el galo durante la sustentación peruana ante los magistrados.
Además, Pellet afirma que con un mapa se pueden corroborar sus alegatos.
“Un croquis basta para demostrar que el punto de la limitación no puede estar situado en el paralelo que Chile indica”, sostuvo.