La prensa les respira en la nuca a Justin Bieber y Selena Gomez, quienes al parecer están limando asperezas para darse una segunda oportunidad.
Esta vez se los vio paseando en el impresionante Ferrari blanco que el canadiense posee, quien justamente estaba vestido como para jugar un partido de beisbol, mientras que la morena escondía sus ojos bajo unas gafas de sol.
Según cuentas nuestras fuentes, Selena Gomez y Justin Bieber esquivaban a los medios tras celebrar un almuerzo con postre y todo en uno de los conocidos restaurantes que alberga Beverly Hills.
¿De qué habrán hablado durante el banquete?