Las multitudes llenaron el National Mall en un crujiente lunes para la segunda toma de posesión del presidente Barack Obama, quien recitará el juramento del cargo y la dirección de la nación un día después de que oficialmente comienza su segundo mandato.
Entonces, el primer presidente afro-americano se convertirá en el décimo séptimo líder de EE.UU. para ofrecer un segundo discurso inaugural antes de encabezar el desfile tradicional Pennsylvania Avenue hasta la Casa Blanca.
En medio de la pompa y ceremonia, con trompetas anunciando que anuncian la llegada de dignatarios y rojas, blancas y azules adornados todo el centro de Washington, el evento simboliza la democracia estadounidense con una extensión pacífica del poder basada en la elección de noviembre pasado que volvió a Obama a la Casa Blanca.
"Bienvenidos a esta celebración de nuestra gran democracia", declaró el senador Charles Schumer, demócrata de Nueva York, en la apertura de la toma de posesión presidencial 57a de la nación.
Un segundo mandato de Obama se ha comprometido a presionar por una reforma de las políticas de inmigración de la nación y nuevas maneras de impulsar la economía de pulverización, las propuestas que están obligados a suscitar enfrentamientos con sus rivales republicanos, y supervisar la aplicación de Obamacare.
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