El integrante de One Direction, Harry Styles, conoce que el éxito es momentáneo, y prueba de ello, es que en su juventud la vivió como todos.
Según Will Sweeney, un amigo de la infancia, el ídolo adolescente hacía múltiples travesuras en los supermercados.
Agregó que: “Harry Styles era la pareja perfecta para jugar un atrevido juego, en esos buenos tiempos les gustaba ir a los supermercados y arrasar sus estanterías para esparcir alimentos envasados por el suelo”.
“Nos gustaba actuar como completos idiotas en público. Harry iba a Testo, fingía tener el síndrome de Tourtette e iba caminando y gritando”.
“Nos gustaba tirarnos cosas el uno al otro, creábamos caos y un poco de desastre. Lo dejamos por seguridad y por los clientes”.
“A Harry le encantaba. Él siempre hacía cosas divertidas y atrevidas con una sonrisa, y nunca le importó lo que la gente pensara”.