Jueves 25 de abril 2024 | Contáctenos
Potentes réplicas sacudieron la frontera entre Irán y Pakistán, hoy miércoles, un día después de un gran terremoto arrasó la región, matando al menos a 39 personas e hiriendo a más de 170.
La ciudad paquistaní de Mashkel está "totalmente destruida", según un periodista local en el lugar. Farooq Kabdani dijo casi todas las casas y tiendas de barro de la ciudad se habían derrumbado. Sugirió que la cifra de muertos podría subir, pues unas 25 personas continúan desaparecidas.
El gran terremoto del martes, con capacidad de 7,8 grados según el Servicio Geológico de EE.UU. y de 7,5 anunciado por la Agencia Sismológico Europeo-Mediterráneo, tuvo su epicentro a unos 50 kilómetros al este de la ciudad de Khash, Irán, pero sacudió edificios altos lugares tan lejanos como Nueva Delhi, cerca de 1.500 millas de distancia.
Quince víctimas gravemente heridas han sido evacuadas al hospital de Quetta Militar Central, tienen edades comprendidas entre 3 y 50 años de edad.
El sismo fue descrito por medios iraníes como la peor tragedia en 50 años, pero la mayoría de las bajas confirmadas parecía estar en el lado paquistaní de la frontera.
Funcionarios en Mashkel Distrito en la provincia de Baluchistán de Pakistán dijo que 38 personas murieron allí, mientras que 170 resultaron heridas, incluyendo 30 en estado crítico.
De Irán estatal Press TV informó de un caso confirmado de muerte iraní, señalando que los informes iniciales habían sugerido una cifra de muertos mucho mayor. Un hospital en la ciudad iraní de Saravan, cercana al epicentro, informó 10 muertes el martes.
Washuk Khan Mohammad, el comisionado diputado local, dijo que el área Mashkel fue alcanzado por dos réplicas más este miércoles, que dijo miden 6.5 y 4.4 en la escala de Richter, causando más daño.
Las condiciones en Mashkel, que se encuentra al sur-oeste de Quetta, fueron descritas como "miserables" por Kabdani. La zona está "totalmente destruida", añadió.
El Centro de Geofísica de Teherán dijo que el sismo duró 40 segundos y lo describió como el más fuerte que golpeó la zona en más de 50 años.
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