Ministra de la Mujer se solidariza con madre e hija que denuncian haber sido agredidas por embajador ecuatoriano

El cuestionado embajador ecuatoriano Rodrigo Riofrío Machuca

La ministra de la Mujer, Ana Jara Velásquez, dijo esperar una sanción ejemplar para el embajador ecuatoriano Rodrigo Riofrío que reconoció mediante comunicado, haber estado envuelto en hechos de violencia el pasado sábado, con dos ciudadanas peruanas en un supermercado del distrito de Magdalena.

En declaraciones a un medio de comunicación televisivo, la ministra Jara consideró que la Cancillería a través de su representante Rafael Roncagliolo, sabrá estar a la altura de las circunstancias y agotará la vía diplomática con los protocolos que correspondan, ante una situación de agresión física y verbal con la Sra. Cristina Castro y su hija, que envuelve al embajador ecuatoriano Riofrío Machuca.

“A confesión de parte, relevo de pruebas”, dijo la ministra Jara, para agregar que una sanción contra el diplomático ecuatoriano “se cae de maduro”. En ese sentido, precisó que es imperativo erradicar la impunidad en hechos de violencia, independientemente los cargos diplomáticos que tengan sus actores, ya que estos delitos no reconocen nacionalidad, credo, raza, condición económica, etc.

Asimismo, Jara fue contundente en manifestar que no debe haber más permisividad social frente a hechos de violencia de género, sea de hombre hacia mujer o viceversa, por ello, dijo el gobierno del Pdte. Ollanta Humala y sus Ministros, fomentan una cultura de paz, de tolerancia, de trato igualitario entre hombres y mujeres,

Añadió que el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables desarrolla campañas preventivas en materia de violencia y discriminación, a través de los Centros de Emergencia Mujer (CEM) mediante sus promotores, en una labor de promoción de los derechos de la mujer que se efectúa casa por casa. Asimismo, la campaña dirigida al segmento de adolescentes y jóvenes, denominada “Quiéreme sin violencia, marca la diferencia”, destinada a prevenir la violencia, agresividad y de reconocimiento de signos de posesión en todos los estratos sociales.