Viernes 26 de abril 2024 | Contáctenos
Las cajas negras del tren de alta velocidad que se precipitó fuera de los caminos en el noroeste de España se han recuperado de los restos y entregado a los investigadores, según las autoridades.
Los registradores que tiene las velocidades, distancias y otros datos, son cruciales para resolver el misterio de por qué el Alvia 151 se descarrilo en una curva cerrada en Santiago de Compostela cuando se sospecha que iba a más del doble de la velocidad autorizada.
El País informó que el conductor, de 52 años de edad, Francisco José Garzón, había recibido una orden para reducir la velocidad de apenas unos segundos antes del accidente, y reconoció presionar un botón en la cabina de pilotos. No quedó claro si había sido incapaz o no a frenar el tren, que tenía cinco minutos de retraso.
Una portavoz de los tribunales de Santiago del Compostela, María Pardo Ríos, confirmó el viernes que se habían encontrado "cajas negras" del tren, pero no indicó cuánto tiempo tomaría el análisis.
La policía revisó el número de muertos el jueves que llegó a 78, pero dijo que el recuento podría cambiar a medida que se identifican las partes de los cuerpos. Antonio del Amo, jefe de la unidad forense central de la policía nacional española, dice 78 cuerpos habían sido recuperados, junto con numerosas partes de otros cuerpos. Dijo que seis de los cadáveres tenían que ser aún identificados.
Jefe de la policía de la ciudad, Jaime Iglesias, dijo que el conductor del tren había sido detenido desde el jueves por la noche. Pero Pardo Ríos dijo que no sería interrogado el viernes.
Garzón fue llevado desde el lugar de la tragedia, con el rostro cubierto de sangre. Le dieron nueve puntos de sutura en una herida en la cabeza, pero por lo demás aparentemente salió ileso.
El conductor pasó la noche en el hospital con su madre a su lado y bajo custodia policial. Contactado por teléfono por el diario regional La Voz de Galicia, Garzón se negó a comentar más allá de decir "Usted puede imaginar como estoy".
En una llamada grabada a los servicios de emergencia poco después de la catástrofe, Garzón habría dicho: "Yo debería haber estado yendo a 80 [km / h] pero iba a 190". Según los informes, ha añadido: "Esperemos que no haya ningún muerto".
Francisco Jose Garzon Amo, el conductor del tren que descarriló matando al menos a 80 personas en España, tenía una foto en Facebook donde hacia larde de las velocidades que alcanzaba al conducir los trenes.
Garzón presuntamente dio negativo en consumo de alcohol tras el accidente.
La posición de Garzón se vio comprometida por la aparición de una fotografía que envió a su página de Facebook que muestra su velocímetro a 200 kmh. No estaba claro si, cuando se tomó la fotografía, que estaba en un tramo de la red en la que se permitía altas velocidades.
No obstante, sorprendió a los amigos de Garzón. Uno de ellos escribió: "Vas como los badajos sangrientas, muchacho de freno.". El conductor respondió: "Estoy en el límite que no puedo ir más rápido, de lo contrario me voy a multar.".
El diario El Mundo, que publicó por primera vez la fotografía y el intercambio de mensajes en su página web, dijo que habían sido retirados de la página de Facebook de Garzón.
A velocidades más bajas, las señales de advertencia se emiten. Pero se deja al conductor para ponerlas en práctica.
Según Renfe, había 218 pasajeros y cinco funcionarios en el tren implicado. Es el peor accidente ferroviario de España desde hace más de 40 años. Por la noche del viernes por la mañana, 83 personas se encontraban todavía en el hospital, con 32 de ellos en la lista crítica.
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