El fiscal supraprovincial Héctor de la Cruz denunció ayer domingo 28 de julio penalmente y solicitó al Poder Judicial la reclusión de la ex parlamentaria nacionalista Nancy Obregón, quien fuera detenida, junto con sus familiares y otras 20 personas, por la Dirandro por presuntos vínculos con el narcotráfico y el financiamiento al terrorismo. Lo mismo fue solicitado para los demás implicados.
El fiscal Héctor de la Cruz llegó a dicha conclusión, según trascendió en un medio de comunicación local, luego de evaluar las pruebas que consideró contundentes en contra de la ex congresista. Pues en el curso de la investigación, la misma Nancy Obregón habría admitido el pago a cabecillas terroristas, después de que Esperanza Morales, alias ‘Techi’, esposa de Wilder Satalaya,
exguardaespaldas de Obregón, también sometida a investigación, habría señalado que Obregón le había ordenado transferir dinero a Florindo Eleuterio Flores Hala, ‘camarada Artemio’, y a Víctor Quispe Palomino, alias ‘José’.
De acuerdo a la acusación, el objetivo de Nancy Obregón consistía en conseguir “protección armada para frenar el avance de las operaciones de erradicación en los valles de Sión, Santa Rosa de Mishollo y Pizana, entre otras zonas en las que operaba el Corah en la región San Martín”. Una prueba considerada decisiva en la denuncia por financiamiento al terrorismo.
En lo que concierne a la acusación por narcotráfico, las numerosas, cientos, llamadas telefónicas que se le interceptaron a Nancy Obregón revelan, reza lo propalado por los medios de prensa, que se comunicaba con ‘narcos’ de Colombia, Bolivia y Ecuador. En dichas conversaciones escuchas, la ex parlamentaria se comprometía a mandar mercadería ilegal a los países en mención.