El Papa Francisco ha presidido una audiencia bajo un calor abrasador en la Plaza de San Pedro en aparente buen estado de salud después de cancelar dos días de reuniones debido a una enfermedad.
Francisco comenzó su programa semanal hoy miércoles a una hora temprana, encuentro con los peregrinos enfermos y discapacitados que fueron trasladados a un auditorio del Vaticano para evitarles el calor abrasador en la plaza.
Francisco les dijo: "Pensamos que sería mejor aquí, donde es un poco más fresco, y no bajo ese sol ardiente."
Después, Francisco presidió como de costumbre sobre la audiencia de una hora al aire libre.
El Papa de 77 años de edad, se vino abajo con una enfermedad no especificada el lunes, canceló sus actividades hasta ayer martes.