La presidenta del Consejo de Ministros, Ana Jara Velásquez, anunció anoche que el Gobierno adquirirá un sistema satelital para la alerta de tsunami en todo el litoral peruano, lo cual permitirá que la población evacúe a tiempo ante la presencia de este fenómeno natural y evitar así mayores daños personales.
Destacó que el sistema contará con equipos de comunicación satelital y radio que serán instalados desde Tumbes hasta Tacna y cuya central será administrada desde Lima, en coordinación con el Servicio de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú.
Jara dijo que con este sistema se busca brindar tranquilidad a las familias que tienen sus viviendas en las inmediaciones del litoral.
“Estamos en pleno proceso de selección para la adquisición de un sistema de alarma ante la presencia de un tsunami. Este sistema permitirá que la población tenga la certeza de que el nivel de sismo vaya a producir olas que nosotros conocemos como tsunami”, señaló.
Manifestó que la compra forma parte del plan preventivo que implementa el Gobierno, a través del Sistema Nacional de Defensa Civil.
La jefa del Gabinete Ministerial hizo este anuncio luego de participar junto al Presidente de la República, Ollanta Humala, en el simulacro nocturno por sismo y tsunami que se realizó a nivel nacional, a las 20:00 horas de ayer, con el propósito de concientizar a la población sobre la probabilidad de que un fenómeno de tal naturaleza ocurra de noche.
En el simulacro de esta noche, el “sismo” tuvo una magnitud de ocho grados en la escala de Richter y una duración de un minuto.
Provista del chaleco del Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI), la jefa del Gabinete Ministerial se dirigió hacia la zona de seguridad de Palacio de Gobierno, ubicada en el Patio de Honor, ni bien se activó la alarma que marcó el inicio del ensayo.
El personal de la Casa de Gobierno y de la Presidencia del Consejo de Ministros que a esa hora se encontraba laborando, se sumó al simulacro, el primero de este tipo que organiza el INDECI en el presente año.
Posteriormente, Jara Velásquez se trasladó a la Plaza Mayor de Lima, donde recorrió las instalaciones de respuesta ante emergencias implementadas en el lugar.
Acompañada del jefe del INDECI, Alfredo Murgueytio, recopiló la información del caso y realizó el reconocimiento de los supuestos daños, a través de los instrumentos de última generación instalados en el Puesto de Comando Avanzado (PCA).
El PCA, que estuvo a cargo de personal especializado del INDECI en el manejo de información sobre evaluación de daños ocasionados por un desastre, cuenta con equipos de comunicaciones, cómputo, informática, televisión y telefonía satelital, así como el visor SINPAD, que es una herramienta tecnológica desarrollada por el INDECI para el registro de emergencias y peligros.
CIFRAS DEL SIMULACRO
De acuerdo con la evaluación de daños a nivel nacional al 100% proporcionada por el INDECI, 82,966 personas resultaron “fallecidas”, 799,930 “heridas”, 3,482 “desaparecidas”, 4’484,646 “damnificadas” y 3’424,130 “afectadas”.
Según la misma fuente, 648,290 viviendas resultaron “colapsadas”, 576,967 “inhabitables” y 829,511 “afectadas”.
Tras recordar que el Perú se encuentra ubicado dentro del denominado “Cinturón de Fuego del Pacífico” y casi al borde del encuentro de dos placas tectónicas, la Sudamericana y Nazca, la presidenta del Consejo de Ministros subrayó la importancia del simulacro así como la respuesta de gran parte de la población al participar del mismo.
“Este tipo de ensayos permite prepararnos ante un sismo y posterior tsunami, mediante la práctica responsable de los tres pasos difundidos a la población a propósito del simulacro: prepárate elaborando tu plan de evacuación y teniendo lista tu mochila para emergencias, ubícate en tu zona de seguridad interna y evacúa hacia el área segura externa”, señaló.
Se debe indicar que el simulacro nocturno, que permitió evaluar la Red Especial Satelital de Comunicaciones en Emergencias (Redsat), también tuvo como objetivos lograr que las autoridades, en los tres niveles de gobierno, implementen las acciones de preparación y respuesta ante un sismo y tsunami y motiven la participación responsable de la población en su jurisdicción, y que los medios de comunicación participen con la difusión de los mensajes y en la cobertura de las actividades.