Jueves 18 de abril 2024 | Contáctenos
La comisión investigadora del “Caso Orellana” asistirá hoy martes 13 al penal de Ancón para su segunda entrevista con el principal implicado en los hechos que son materia de investigación: las irregulares transferencias de terrenos de propiedad del Estado y los nexos del empresario Rodolfo Orellana Rengifo con altos funcionarios del Estado.
Mañana miércoles 14, hará lo propio en el centro penitenciario “Santa Mónica” para entrevistar a Judith Orellana Rengifo, hermana del empresario. El anuncio lo hizo el presidente de este grupo multipartidario, congresista Vicente Zeballos (SN), luego de concluir el testimonial de dos víctimas más de la red de corrupción del abogado.
A la sesión del lunes asistieron Alfredo Ilazabal Montes y su esposa Emilia Napa de Ilazabal. Ellos acudieron al Estudio Orellana (ubicado en ese entonces en la calle Matier, San Borja) con la intención de buscar asesoría legal para evitar la pérdida de su casa que fuera hipotecada como garantía de un préstamo solicitado, en 1997, al desaparecido Banco de Lima.
Ilazabal Montes informó que en 1997 solicitó un préstamo por 180 mil dólares para “incursionar en la industria farmacéutica” como importador de medicina y equipos. Ofreció como garantía su casa para tramitar un segundo préstamo por una cifra similar, con un pago adelantado del 50%.
Poco después, el Banco de Lima fue absorbido por el Wiese-Sudameris y posteriormente pasó al Scotiabank, quien tomó la deuda que mantenía con Alfredo Ilazabal. Éste, según explicó, solicitó una refinanciación de su deuda porque los intereses exigidos por el banco triplicaban el valor del préstamo.
El afectado informó que mediante un aviso publicado en un diario local acudió al Estudio Orellana, que se presentaba como una firma de “abogados especializados en problemas hipotecarios”. Ambos firmaron un contrato con el único objetivo de refinanciar la deuda, pero el empresario y abogado empezó a pedir documentación adicional “para presionar”, dijo, al Banco y reducir la deuda.
Falsificando documentos, el inmueble de Ilazabal (de mil metros cuadrados) pasó a manos de terceros, testaferros de Orellana según el denunciante, quienes procedieron a embargar la propiedad en el 2011.
La denuncia del afectado se encuentra en manos de la fiscalía. En las preguntas que le hicieron los congresistas de la comisión, Víctor García Belaunde (AP-FA) y Luis Galarreta (PPC-APP), se dieron a conocer los nombres de los testaferros de Orellana Rengifo que participaron en acciones similares y en perjuicio de decenas de propietarios de inmuebles. Ilazabal dijo que desconocía la “metodología” del trabajo del empresario y que esperaba que el Congreso legisle sobre los vacíos legales que son aprovechados por personas y empresas inescrupulosas para quedarse con propiedades ajenas.
Por su parte, la esposa, Emilia Napa, denunció que Orellana Rengifo, acompañado de la excongresista Mercedes Cabanillas, ingresaron en enero de 2011 a su casa, sin autorización, con el propósito de “intercambiar” el domicilio: Emilia Napa pasaría a ocupar la propiedad de Cabanillas Bustamante y viceversa.
La afectada dijo que la exparlamentaria ingresó a la casa con dos personas más y a disponer de los trabajos de remodelación, pero ella les echó agua y decidieron salir ante la protesta del propio Orellana.
El presidente de la comisión informó que 23 personas han pasado de condición de citados a investigados, entre ellas Zoila Montoya Sernaqué, asistenta personal de Orellana Rengifo, quien fue citada a la sesión de ayer, pero no acudió.
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