Ecuador: Moreno lidera ventaja en las elecciones presidenciales

Lenín Boltaire Moreno está a la cabeza después de las elecciones presidenciales de ayer domingo en Ecuador. El candidato ungido del presidente de la izquierda Rafael Correa estuvo cerca del margen necesario para evitar una segunda ronda contra Guillermo Lasso, un ex banquero conservador, en una prueba para la izquierda maltrecha de América Latina.

Después de una campaña que subrayó el legado divisivo de Correa, el economista entrenado en Estados Unidos que lleva una década en el poder está confiado, los resultados oficiales mostraron que su protegido había vencido a Lasso. Para ganar en forma definitiva, debe asegurar al menos el 40 por ciento de los votos y mantener una ventaja de 10 puntos sobre el Sr. Lasso.

Con más del 86 por ciento de los votos contados, el Sr. Moreno lideró con el 39,1 por ciento, mientras que el Sr. Lasso tenía el 28,3 por ciento. Detrás se encontraba Cynthia Viteri, una antigua legisladora de centro-derecha, con el 16,4% de las encuestas. Paco Moncayo, ex alcalde de Quito, de izquierda, ocupó el 6,7 por ciento. Los resultados finales se esperan más tarde el lunes.

"Seguimos firmes", dijo Moreno mientras el conteo continuaba. "Esta es una pelea de larga distancia. Ganaremos esta batalla.

En el caso de una segunda vuelta, los votos combinados de la oposición podrían superar las posibilidades de Moreno, poniendo fin a la "Revolución Ciudadana" de Correa y al mismo tiempo aflojando aún más el control de los gobiernos de izquierda en la región.

El Sr. Correa subió al máximo en el último boom del petróleo, trayendo estabilidad política y crecimiento económico a la nación de la OPEP, una vez volátil.

Sin embargo, el fin de la subida de las materias primas provocó una recesión económica, un aumento del desempleo y acusaciones de corrupción. Por otra parte, el estilo mercurial de Correa, atacar a los enemigos en la televisión nacional y utilizar a los medios de comunicación como un chivo expiatorio, enfureció a muchos ecuatorianos y empañó sus logros.

Simón Pachano, analista de Quito, dijo que las elecciones del domingo representaban "el anti-Correa contra Correa".

Aunque con un estilo más conciliador, el Sr. Moreno, ex vicepresidente discapacitado, fue visto por muchos votantes como un candidato, ganando apoyo, ya que prometió seguir la política populista de Correa. "El significa continuidad para todas las grandes cosas de esta revolución", dijo Julia Gutiérrez, profesora jubilada.

Una victoria para el izquierdista Moreno "significaría sólo una continuación del status quo", según Oxford Economics, y consolidaría el legado de Correa, pero de una manera más emoliente. Los enemigos políticos acusan al Sr. Correa de ser un matón de piel delgada que "arroja odio", de manera similar a la de Donald Trump, el presidente de Estados Unidos.

Algunos también se quejan de crecientes niveles de endeudamiento. Desde que Correa voluntariamente incurrió en incumplimiento de pagar $ 3.2bn en bonos en 2008, China ha sido el principal prestamista del país. Ecuador regresó a los mercados en 2014, mientras que Beijing aún se debe más de 8.000 millones de dólares por Quito, según el economista Alberto Acosta-Burneo, con sede en Guayaquil.

Una victoria para el libre comercialista Lasso, quien dice que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, sería "cordialmente" dado un mes para salir de la embajada de Ecuador en Londres, agregaría cambios regionales más amplios después de la retirada de un gobierno izquierdista populista en Brasil. De presidentes de negocios en Argentina y Perú.

El banquero de 61 años dijo al Financial Times que, como muchos otros ecuatorianos, "también están cansados de los políticos. Por eso decidí gobernar.

El Sr. Correa se ha comprometido a trasladarse a Bélgica tras abandonar la presidencia. Pero goza de un 60 por ciento de calificaciones de aprobación y podría seguir siendo el ecuatoriano más poderoso desde el último caudillo de armas libres, el político caudillo, León Febres Cordero, uno de sus adversarios ideológicos que gobernó en la década de 1980 y murió en 2008 - un año después de que Correa asumiera el cargo.