Jueves 25 de abril 2024 | Contáctenos
Theresa May ha prometido que "el odio y el mal" del tipo visto en el ataque terrorista a una mezquita del norte de Londres que dejó un hombre muerto y 10 heridos nunca tendrá éxito.
Una furgoneta arremetió contra varias personas, cerca a una mezquita, mientras el conductor grito: "Voy a matar a todos los musulmanes".
Hablando después de una reunión con funcionarios de seguridad y ministros en el comité de emergencia del gobierno Cobra, el primer ministro confirmó que la policía cree que el atacante que condujo cerca de la mezquita de Finsbury Park había actuado solo.
La Sra. May, quien más tarde se reunió con líderes de la comunidad en una visita a la mezquita, condenó el ataque como "Asqueroso" como otros atentados terroristas recientes.
Elogió la "valentía" de los miembros del público que detuvieron al conductor de la furgoneta -descrito por testigos como un gran hombre blanco- antes de que la policía llegara a las 12.20.
La furgoneta blanca arrolló a los peatones que estaban ayudando a un anciano adorador que se había derrumbado en un área que estaba ocupada con personas que habían asistido a oraciones de la noche del Ramadán.
El jubilado al que estaban ayudando más tarde murió. La policía dijo que ya había recibido primeros auxilios de los miembros del público y que aún no se sabe si su muerte fue causada por el ataque.
Un hombre de 48 años fue arrestado bajo sospecha de intento de asesinato por el incidente en Seven Sisters Road.
Ocho personas fueron llevadas al hospital y otras dos fueron atendidas por lesiones menores fuera de la Casa de Bienestar Musulmana, a unos metros de la mezquita de Finsbury Park. La policía dijo que todas las víctimas eran musulmanes.
Un testigo dijo que el atacante gritó sobre matar a musulmanes mientras que él fue sostenido por la gente local. Él supuestamente dijo: "Hice el trabajo... hice mi parte". Los testigos afirmaron que añadió: "Lo haría de nuevo, lo haría de nuevo".
El video muestra una escena de caos mientras la gente trataba de ayudar a los heridos. Un hombre pudo ser visto dando RCP a una víctima en la calle mientras que la lesión de cabeza de otro hombre fue tratada con un aderezo improvisado.
La gente podía oír gritos y gritos en medio del caos y manchas de sangre eran visibles en el pavimento. En un video, se ve a un grupo de hombres que sostienen al sospechoso al suelo mientras llaman a la policía.
El comisionado auxiliar de la Policía Metropolitana, Neil Basu, agradeció a los miembros del público por atrapar al sospechoso, ya que dijo que el ataque tenía "todas las características del terrorismo".
Anteriormente, la Policía Metropolitana dijo en un comunicado: "Ha sido llevado al hospital por precaución y será puesto bajo custodia una vez que sea dado de alta y también será sometido a una evaluación de salud mental a su debido tiempo".
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