Viernes 19 de abril 2024 | Contáctenos
El primer ministro Mariano Rajoy se enfrenta a la mayor crisis constitucional de España en décadas después de que el referéndum sobre la independencia de la violencia en Cataluña abriera la puerta a que su región más rica se moviera para la secesión esta semana.
Las calles de Barcelona, la capital catalana, estaban tranquilas el lunes, pero los editores de los periódicos dijeron que el referéndum prohibido, en el que funcionarios catalanes dijeron que el 90 por ciento de los votantes habían decidido abandonar España, prepararon el escenario para un enfrentamiento decisivo entre Madrid y la región .
"Todo podría empeorar", dijo el periódico catalán moderado La Vanguardia en un editorial después de que la policía española utilizara bastones y balas de goma para interrumpir la votación, provocando violencia y heridas a unas 840 personas.
"Estamos entrando en una fase de huelgas y protestas callejeras ... y con más movimiento, más represión".
Cataluña es un centro de industria y turismo que representa un quinto de la economía española, una base de producción de grandes multinacionales de Volkswagen a Nestlé y que alberga el puerto marítimo de mayor crecimiento de Europa.
El líder regional de Cataluña declaró tarde el domingo que los votantes se habían ganado el derecho a la independencia y dijo que presentaría los resultados al parlamento de la región, que tenía entonces el poder de mover una moción de independencia.
Los comentarios de Carles Puigdemont no cumplieron con una declaración de independencia, pero lanzaron un reto a Rajoy, que tiene el poder constitucional de sacar al gobierno regional y poner a Cataluña bajo control central en espera de nuevas elecciones.
Eso elevaría aún más las tensiones en la región de 7,5 millones de personas, un antiguo principado con su propia lengua y cultura, y potencialmente dañaría la resurgencia de la economía española.
El euro perdió un tercio de un centavo de los EE.UU. después de la votación, aunque más tarde recuperó terreno. El índice bursátil IBEX de España cayó un 1,3 por ciento a medida que se inauguró el lunes, mientras que el rendimiento de la deuda pública aumentó.
Los principales bancos de inversión esperan que la crisis se resuelva con una oferta de Rajoy de más autonomía.
"Creemos que el riesgo de enfrentamientos más grandes en el corto plazo está aumentando, involucrando en las interrupciones extremas con costos económicos severos potenciales", dijo Citibank en una nota el lunes, pero no consideró esto como el resultado más probable.
Rajoy se ofreció a llamar a las conversaciones políticas de todos los partidos el domingo para "reflexionar sobre el futuro" de Cataluña, pero mantuvo su rotundo rechazo a la independencia como opción.
Los intentos del gobierno de Madrid de impedir el referéndum del domingo a través del uso de la fuerza policial trajeron críticas de otros miembros de la Unión Europea (UE), incluyendo Gran Bretaña y Bélgica. Pero ha habido silencio de la propia UE.
En casa, la crisis no parece haber puesto en peligro el apoyo al gobierno nacional minoritario de Rajoy, con los partidos principales respaldando ampliamente su oposición a la independencia catalana. Había, sin embargo, críticas de su manejo de la cuestión.
El periódico antiindependencia El País escribió en un editorial de la "absoluta incapacidad de Rajoy para manejar la crisis desde el principio".
El gobierno de Catalunya dijo que 2,26 millones de personas votaron el domingo, una participación cercana al 42 por ciento, a pesar de la represión. Los resultados no fueron una sorpresa, ya que no se esperaba que muchos sindicalistas resultaran. Las encuestas de opinión mostraron alrededor del 40 por ciento de apoyo a la independencia.
En el período previo a la votación, Puigdemont había dicho que pasaría a una declaración de independencia dentro de las 48 horas de un voto de "Sí". Pero la interrupción de la encuesta podría complicar cualquier movimiento.
Puigdemont pidió a Europa el domingo que intervenga para asegurarse de que los derechos fundamentales sean plenamente respetados.
"En este día de esperanza y sufrimiento, los ciudadanos de Cataluña se han ganado el derecho a tener un Estado independiente en forma de república", dijo Puigdemont en un discurso televisado.
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