La Corte Internacional de Justicia (CIJ) falló contra Bolivia en su disputa con el vecino Chile por el acceso al Océano Pacífico. El desenlace de la disputa cuyo inicio se remonta a fines del siglo XIX cuando Bolivia perdió el acceso al mar en 1884 después de una guerra con Chile se ha revelado de esa manera adverso para este país mediterráneo de América del Sur. .
En el dictamen, la máxima instancia de justicia a nivel internacional señaló que Chile no estaba obligado a negociar la concesión de acceso a Bolivia. La decisión, que se produce después de cinco años de deliberaciones, es definitiva y vinculante.
La sentencia emitida por los jueces del tribunal supremo no obstante no decide si Chile o Bolivia tienen los derechos sobre el tramo costero en disputa, solo dictamina que Chile no está obligado a negociar con la vecina Bolivia sobre el punto en cuestión.
Las fronteras entre los dos vecinos datan del Tratado de Paz y Amistad de 1904, alrededor de un cuarto de siglo después de que Bolivia cediese la provincia de Antofagasta y sus 400 km de costa a Chile como consecuencia de la llamada Guerra del Pacífico (1879-1884).
El fallo contra Bolivia significa un gran revés para el presidente Evo Morales, ya que el tema toca la fibra nacional del boliviano de a pie. El presidente boliviano viajó a La Haya para asistir personalmente al anuncio del fallo. Antes de subir al avión dijo: "Nuestro regreso al mar no solo es posible, es inevitable".
Gran parte del comercio de Bolivia pasa por los puertos chilenos y Bolivia argumentó que tener acceso soberano al Océano Pacífico era clave para su economía, pues impulsaría su crecimiento. Por su parte, Chile insistió en que el tramo costero en disputa era territorio soberano de Chile y, como tal, "no formaría parte de las negociaciones de nadie".
Cabe señalar que, a pesar de no tener acceso al mar, Bolivia mantiene una pequeña armada y celebra el Día del Mar cada año.