Viernes 26 de abril 2024 | Contáctenos
Jamal Khashoggi, a la izquierda; su sosías, a la derecha.
Dos hechos revelados por la prensa refuerzan la tesis de que la muerte del periodista crítico Jamal Khashoggi sería parte de un plan orquestado desde los niveles más altos de poder del reino de Arabia Saudita.
Por una parte, el video difundido por la cadena multinacional CNN, donde se puede ver a un supuesto agente de inteligencia saudí, vestido con la ropa del periodista crítico, salir por la puerta trasera del consulado de Arabia Saudita en Estambul dos horas después de que Jamal Khashoggi hizo su ingreso. Enseguida se le ve visitar lugares emblemáticos de Estambul, la Mezquita Azul entre ellos.
Por la otra, la información que señala que uno de los agentes saudíes que habría tenido que ver con el asesinato del periodista crítico, se comunicó varias veces desde el consulado nada menos que con el despacho del príncipe heredero saudí Mohammed Bin Salmán. El diario 'Yeni Safak', muy cercano al Gobierno turco, señala que Maher Abdolaziz Mutreb, un miembro del equipo del todopoderoso heredero saudí, llamó por teléfono móvil cuatro veces al jefe del gabinete del príncipe desde el consulado.
"Bedr el Asakir, director de la oficina del príncipe heredero, recibió cuatro llamadas de Maher Abdolaziz Mutreb hechas con un teléfono móvil desde el despacho del cónsul en el Consulado de Estambul después del terrible asesinato", ha publicado el diario, sin citar ninguna fuente que sustente su afirmación.
Estos dos hechos, de acuerdo a los investigadores, constituirían la prueba que un plan para terminar con la vida de Jamal Khashoggi había sido diseñado. Una hipótesis que contradice la del "lamentable accidente", según la cual el periodista crítico habría encontrado la muerte en manos de agentes que se habrían excedido en sus funciones en el interior del consulado saudí en Estambul, a donde el hombre de prensa había ingresado a fin de solicitar un documento necesario para contraer matrimonio con su prometida turca.
Lo que es peor para quienes detentan la hipótesis del “lamentable accidente” se encuentra a esta altura en el hecho que el agente de inteligencia saudí escogido como sosías del periodista crítico fue identificado como Mustafá Al Madani. Un agente cuya contextura tiene parecido con la de Jamal Khashoggi y que tiene más o menos la misma edad que el desaparecido hombre de prensa. Se presume que Mustafá Al Madani formaba parte del grupo de 15 agentes de inteligencia que el día de la desaparición del periodista, el martes 2 de octubre, viajó desde Riad hasta Estambul para participar en el asesinato de Jamal Khashoggi.
Las investigaciones, no cabe duda, están tomando un giro insospechado para quienes defienden la tesis de que el periodista crítico murió a causa de un lamentable accidente. Máxime si hasta el momento nadie da razón del paradero donde se hallan los restos mortales del periodista crítico, que, como ahora se sabe, murió el martes 2 de octubre en el consulado de Arabia Saudita en Estambul, Turquía.
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