Perú: fuerte y claro

Mg. Jorge Luis Martínez, autor de estas líneas

“Ciertamente, todos los problemas judiciales y políticos por los que estamos atravesando no ayudan. Sin embargo, es obligación de todos tratar de mejorar esta situación y que haya un ambiente estable para el desarrollo de las empresas y la inversión. Definitivamente los países estables brindan una mejor imagen internacional, pero hay que reconocer que todos los países pasan por problemas. Nosotros competimos en un mercado global, por lo tanto, necesitaríamos esmerarnos y trabajar en conjunto.”, he ahí palabras del ingeniero Roque Benavides, presidente de la Confiep, a mediados de este decimo primer mes de 2018.

"Por favor no seamos ingenuos, lo que hay acá es una campaña de destrucción. Se ha destruido a algunos partidos políticos, bueno pues ellos tendrán que defenderse, y nosotros tendremos que defender la institucionalidad del sector privado", algo de dos semanas después, a fines de noviembre, en el marco de su intervención en CADE 2018. Palabras preocupantes que como líder del gremio de empresarios privados del Perú Roque Benavides ha dirigido al Ejecutivo, dada las actuales circunstancias que atraviesa nuestro país. El ruido político, le dice Roque Benavides al Ejecutivo ha afectado a nuestra economía. Un hecho que sumado a la incapacidad para gobernar y al poco liderazgo que transmite nuestro actual mandatario, quien solo vive empecinado en el Referéndum del próximo 9 de diciembre, nada bueno anuncia para nuestra economía.

Roque Benavides pone en cuestión con esas declaraciones al sistema de justicia de nuestro país. Y ha hecho bien, pues hoy la lideresa de la oposición, Keiko Fujimori, está en la cárcel, esperando que admitan su apelación, cuando la ley dice que tan solo se necesitan veinte y cuatro horas para que el proceso se inicie. A nivel internacional sorprende que en nuestro país primero te encarcelan y luego te investigan. No le faltan razones a Roque Benavides, pues otro opositor, Alan García, está esperando se admita su asilo por un tema de persecución política que dirige una ONG coadyuvada por algunos fiscales afines a esta organización, en medio de una inmensa campaña de liquidación mediática a todo sector de oposición al señor Vizcarra. No le faltan razones a Roque Benavides cuando el Fiscal de la Nación ha sido deslegitimado por los medios, cuando desde hace semanas el presidente Martín Vizcarra y su premier César Villanueva piden su cabeza. Los dos rivales políticos de esta conocida ONG, que bajo el paraguas de los derechos humanos están petardeando la democracia, e invocan cuando les conviene la CIDH, y cuando no es nada a su favor ni caso le hacen. El doble rasero como siempre. A propósito, el Poder Judicial canceló un programa humorístico, pero absolvió al Movadef organización vinculada a Sendero Luminoso. Así estamos en el Perú con la justicia. No le faltan razones a Roque Benavides.

Estamos prácticamente a fin de año y el comentario en las calles es que la economía no despega y que falta liderazgo en el Ejecutivo, que la reconstrucción del norte sigue esperando. Mientras que hace un día el premier César Villanueva dijo en el Congreso de la República que el Ejecutivo invertirá mil millones de soles para el propósito de la reconstrucción, recordando también que el avance en dicha reconstrucción está muy por debajo de lo que se espera. Ojalá un nuevo Niño costero no esté cerca. Mientras una nueva integrante de la mayoría parlamentaria renuncia a su bancada, dejándonos ver como día a día ese bloque parlamentario se hace pedazos. En fin. Desde esta tribuna creemos que hoy el Legislativo no tiene la fuerza con la que empezó hace dos años, porque el Ejecutivo prácticamente lo ha arrinconado, hasta estar sin fuerza para legislar y menos fiscalizar.