Jueves 25 de abril 2024 | Contáctenos
El gobierno francés está congelando los próximos aumentos en los precios regulados de la electricidad y el gas a raíz de las protestas por los crecientes costos de vida, dijo el primer ministro del país.
También se suspenderán los controles de emisión de vehículos más estrictos que se iniciarán en enero de 2019, una de las demandas del movimiento del "chaleco amarillo" que estalló el mes pasado, dijo el primer ministro Edouard Philippe.
"Después de escuchar la ira, suspendí durante seis meses tres medidas fiscales que incluían aumentos de impuestos al combustible.
"Ningún mérito fiscal pone en peligro la unidad de la nación", dijo Philippe en un discurso televisado, y agregó que la ira en las calles "se origina en una profunda injusticia: no poder vivir con dignidad en el trabajo".
Añadió que cualquier futura protesta debería ser declarada con anticipación y "tendrá lugar con calma".
El llamado movimiento "chaleco amarillo", que comenzó el 17 de noviembre como un grupo de protesta organizado por los medios sociales llamado así por las chaquetas de alta visibilidad que todos los motoristas en Francia deben tener en sus autos, se ha centrado en denunciar un apretón en el gasto de los hogares. Provocado por los impuestos del presidente francés Emmanuel Macron sobre el combustible.
Macron ha dicho que los impuestos son necesarios para combatir el cambio climático.
Abandonarlos podría ser una gran vergüenza cuando los gobiernos se reúnan en Polonia para tratar de determinar las medidas para evitar las consecuencias más dañinas del calentamiento global.
Sin embargo, durante las últimas tres semanas, las protestas se han convertido en un levantamiento anti-Macron más amplio, y muchos critican al presidente por seguir políticas que dicen favorecen a los ricos y no hacen nada para ayudar a los trabajadores pobres.
A pesar de manifestaciones en su mayoría pacíficas en todo el país, las protestas se volvieron violentas en los fines de semana sucesivos en París.
El sábado, el monumento nacional del Arco de Triunfo fue pintarrajeado y las avenidas de los Campos Elíseos fueron dañadas. Coches, edificios y algunos cafés fueron incendiados.
Se estima que el malestar le ha costado millones a la economía, con una interrupción a gran escala para los minoristas, mayoristas, comercios de restaurantes y hoteles. En algunas áreas, la fabricación se ha visto afectada en el período previo a la Navidad.
Los miembros principales del partido La Republique En Marche de Macron dijeron que el gobierno también podría aumentar el salario mínimo a partir de enero, junto con otras medidas para brindar un impulso rápido a los hogares de bajos ingresos, aunque los detalles siguen sin estar claros.
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