Los incendios forestales en Bolivia han consumido dos millones de hectáreas desde agosto

Los incendios forestales en Bolivia han incendiado dos millones de hectáreas (4.9 millones de acres) de bosques y praderas desde agosto, incluidas algunas áreas protegidas ambientalmente, dijeron el lunes funcionarios. Un ministro del gabinete denunció el "juego macabro" de apagar incendios, luego los "saboteadores" lo restablecieron a espaldas de los bomberos.

Cinthia Asin, ministra de medio ambiente de la región oriental de Santa Cruz, instó al presidente Evo Morales a declarar un desastre nacional para ampliar los esfuerzos de lucha contra incendios y canalizar mejor la ayuda internacional.

Santa Cruz es el más afectado por los departamentos de Bolivia desde que comenzaron los incendios en mayo y se intensificaron a fines de agosto. "Se han quemado más de dos millones de hectáreas de tierra" en Santa Cruz, dijo Asin. "Ya hemos pasado casi un mes (con este problema) y aún no se ha declarado un desastre nacional", dijo Asin, que los incendios han destruido casi 900,000 hectáreas de áreas protegidas. Los más afectados son las áreas de Otuquis y San Matías del este de Bolivia, ricas en flora y fauna diversa.

El ministro de Defensa, Javier Zavaleta, dijo que se encontró a personas reiniciando incendios ilegalmente en lugares donde se habían apagado los incendios. "Estamos seguros de que los incendios se están provocando deliberadamente", dijo Zavaleta. Culpó a los "saboteadores" y a los granjeros y terratenientes "que inician incendios que no pueden controlar", dijo a los periodistas. "Este es un juego macabro. Apagamos los incendios y hay personas detrás de nosotros que los están comenzando de nuevo." No podemos controlar los incendios forestales como este ", dijo Zavaleta.

Los ambientalistas culpan a las leyes promulgadas bajo el mandato de Evo Morales, quien ha alentado la quema de bosques y pastizales para expandir la producción agrícola. El gobierno atribuye los incendios al clima seco y los vientos. El gobierno de Bolivia recientemente autorizó a los agricultores a quemar 20 hectáreas (casi 50 acres) en lugar de las habituales cinco hectáreas (12 acres), lo que se cree que ha contribuido a miles de incendios forestales.