Viernes 26 de abril 2024 | Contáctenos
Decenas de miles de rescatistas trabajaron hasta la noche del lunes para encontrar sobrevivientes de un poderoso tifón en Japón que mató al menos a 56 personas, mientras la lluvia fresca amenazaba con obstaculizar sus esfuerzos.
El tifón Hagibis se estrelló en el país el sábado por la noche, desatando fuertes vientos y lluvias torrenciales en 36 de las 47 prefecturas del país, provocando deslizamientos de tierra e inundaciones catastróficas.
El número de muertos por el desastre ha aumentado constantemente, y la cadena nacional NHK dijo el lunes por la noche que 56 personas habían muerto y 15 seguían desaparecidas.
Citó su propio recuento basado en informes locales. El gobierno ha dado números más bajos pero todavía está actualizando su información.
"Incluso ahora, muchas personas aún no se encuentran en el área afectada por el desastre", dijo el primer ministro Shinzo Abe en una reunión de emergencia por desastre el lunes. "Las unidades están haciendo todo lo posible para buscarlos y rescatarlos, trabajando día y noche", dijo Abe.
Más adelante en el día, se comprometió a "hacer todo lo que el país pueda" por las víctimas y los sobrevivientes, y ordenó al ministerio de defensa que convoque a hasta 1,000 tropas de reserva para unirse a 31,000 fuerzas activas en operaciones de búsqueda.
Pero el trabajo de rescate que continuaba hasta la noche se arriesgaba a verse obstaculizado por la lluvia adicional que caía en el centro y este de Japón que, según las autoridades, podría causar nuevas inundaciones y deslizamientos de tierra.
El tifón Hagibis causó caos en el transporte durante un fin de semana festivo en Japón, aterrizando vuelos y deteniendo trenes.
"Me gustaría pedirles a las personas que se mantengan completamente vigilantes y sigan vigilando los deslizamientos de tierra y las inundaciones de los ríos", dijo el secretario jefe del gabinete, Yoshihide Suga, en una conferencia de prensa.
En Nagano, una de las regiones más afectadas, las autoridades dijeron que estaban trabajando con cautela.
"Estamos preocupados por el impacto de la lluvia más reciente en los esfuerzos de rescate y recuperación", dijo a la AFP el funcionario local Hiroki Yamaguchi. "Continuaremos las operaciones mientras observamos los desastres secundarios debido a la lluvia actual".
El número de muertos continuó aumentando hasta el lunes por la noche, con cuerpos sacados de automóviles y casas inundadas, ríos hinchados y deslizamientos de tierra.
Las víctimas incluyeron a un trabajador municipal cuyo automóvil fue superado por las inundaciones y al menos siete tripulantes de un buque de carga que se hundió en la bahía de Tokio el sábado por la noche, dijo un portavoz de la guardia costera.
Otros cuatro, de China, Myanmar y Vietnam, fueron rescatados cuando el barco se hundió y la guardia costera todavía estaba buscando un último miembro de la tripulación.
Hagibis llenó ráfagas de viento de hasta 216 kilómetros (134 millas) por hora, pero fueron las fuertes lluvias las que causaron el mayor daño. Un total de 176 ríos se inundaron, principalmente en el este y el norte de Japón, con sus bancos colapsados en dos docenas de lugares, dijeron los medios locales.
Para el lunes por la tarde, unos 75,900 hogares seguían sin electricidad, y el agua se cortó a 135,000 hogares.
El desastre dejó a decenas de miles de personas en refugios, y muchos no estaban seguros de cuándo podrían regresar a sus hogares.
Para el lunes, la mayoría de los trenes del metro habían reanudado el servicio, junto con muchas líneas de trenes bala, y los vuelos también se habían reiniciado.
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