Bolivia: terrorista comunista argentino identificado entre los "manifestantes"

La policía en Bolivia reveló el miércoles que habían identificado entre los "manifestantes" socialistas que se sublevaron para defender al ex presidente Evo Morales un terrorista argentino que se cree que está en la ciudad para "entrenar" a los izquierdistas locales.

Facundo Molares Schoenfeld, de 44 años, fue miembro del Partido Comunista de Argentina durante mucho tiempo antes de unirse a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), una de las organizaciones terroristas más ricas del mundo. La policía cree que fue "contratado" para ir a Bolivia y capacitar a los socialistas y comunistas locales sobre cómo cometer actos de terror para intimidar a la policía y a los funcionarios del gobierno para que permitan que la izquierda permanezca en el poder.

La policía dijo que Schoenfeld recibió una herida de bala mientras ayudaba a exacerbar los disturbios en la ciudad de Montero el 30 de octubre, en el que periodistas y ciudadanos grabaron imágenes de izquierdistas golpeando indiscriminadamente a personas que intentaban protestar pacíficamente contra el intento de Evo Morales de gobernar por un cuarto mandato inconstitucional. Los enfrentamientos mataron a dos manifestantes antisocialistas ese día.

Schoenfeld tardó casi dos semanas en aparecer en un hospital en estado grave, y dos días más desde su llegada el 11 de noviembre para identificarlo.

Según los informes, Schoenfeld está en coma inducido médicamente y la policía lo identificó positivamente con la ayuda de sus padres. La policía encontró conversaciones entre Schoenfeld y su padre en su teléfono móvil al ingresar al hospital que utilizaron para identificarlo y contactar a su familia. Una investigación adicional de las conversaciones en el teléfono móvil de su padre, que la policía confiscó cuando llegó a Bolivia, revela que Schoenfeld estaba actuando sistemáticamente para empoderar violentamente a los partidarios de Evo Morales.

Según los informes, en una conversación, su padre responde a los planes de su hijo, "solo vete, deja que Evo solucione sus propios problemas".

Miguel Ángel Mercado, jefe del departamento de policía de Santa Cruz, Bolivia, dijo a los periodistas el miércoles que las autoridades creen que Schoenfeld estaba en Montero en calidad de "instructor".

"Esto ahora se convierte en un problema mayor", continuó Mercado. “Hacemos un llamado a la comunidad para que tenga mucho cuidado. Una de las tácticas de la narcoguerrilla es lastimarse para culpar a las fuerzas públicas ", agregó, sugiriendo que los partidarios de Morales dispararon contra Schoenfeld para acusar a la policía de brutalidad injustificada.

Óscar Gutiérrez, el jefe de la fuerza especial de lucha contra el crimen de Santa Cruz, dijo a los periodistas que creen que alguien aún no identificado "contrató" a Schoenfeld para ofrecer entrenamiento militar improvisado a los partidarios de Morales para ayudarlos a reprimir la disidencia antisocialista. La policía está investigando no solo quién solicitó la experiencia de Schoenfeld, sino también cómo ingresó a Bolivia después de desaparecer en 2017.

"La presencia de esta persona con entrenamiento militar no es una coincidencia", dijo Gutiérrez. "Esta persona llegó después de ser contratada y eso es lo que estamos investigando: dónde ingresó, cuánto tiempo ha estado aquí, qué tipo de relaciones tuvo".

"Alguien trajo a esta persona aquí para prestar instrucción paramilitar y preparar actos violentos", agregó.

El padre de Schoenfeld, Néstor Hugo Molares, es juez en la ciudad argentina de Trevelín. Su fondo blanco extranjero de clase alta desmiente las reiteradas afirmaciones de Evo Morales y sus partidarios de que la base que apoya su partido Movimiento hacia el Socialismo (MAS) es principalmente indígena y nativa de Bolivia.

Operando bajo el alias "Comandante Camilo", Schoenfeld presuntamente participó en actividades terroristas de las FARC durante al menos una década antes de oponerse al plan de "acuerdo de paz" de 2016 en el que el ex presidente colombiano Juan Manuel Santos legalizó a las FARC. Los medios de comunicación latinoamericanos, siguiendo a Santos y al régimen comunista mediador del liderazgo de Cuba, se refieren a los terroristas de las FARC que continuaron cometiendo actos de terror después del acuerdo de 2016 como "disidentes" de las FARC, aunque este número ahora parece representar a casi todos los miembros de la organización.