Miércoles 17 de abril 2024 | Contáctenos
“Saldremos de esto JUNTOS”, escribió Donald Trump en su cuenta Twitter poco antes de la una de la madrugada de este viernes 2 de octubre (hora de Nueva York). No solo él, sino también la primera dama venían de dar positivo al test Covid-19. Esto, tan solo a 33 días del martes 3 de noviembre, día de los comicios que dirimirán quién, entre el republicano Donald Trump y el demócrata Joe Biden, será el inquilino de la Casa Blanca entre el mediodía del 20 de enero de 2021 y el mediodía del 20 de enero de 2025.
Al primer mandatarioestadounidense no le quedaba otra alternativa. Una de sus más cercanas asesoras, Hope Hicks, venía de dar positivo por coronavirus. La asesora presidencial de 31 años había sido una de las pasajeras del Air Force 1 hace pocos días, cuando Donald Trump viajó a Cleveland, estado de Ohio, para medir fuerzas con Joe Biden en el marco del primer debate presidencial. No solo eso, Hope Hicks acompañó al presidente de 74 años a un mitin de campaña en el estado de Minnesota. Es más, estaba previsto que se desplazaría acompañando a Donald Trump este sábado 3 de octubre al estado de Pensilvania.
Un verdadero baldazo de agua fría, aunque se veía venir. Había sido el mismo Donald Trump quien en el marco de una entrevista concedida a la cadena de noticias Fox dijo que él y su esposa, Melania, habían tomado la decisión de someterse al test del Covid-19 tras enterarse que su cercana colaboradora Hope Hicks había dado positivo. “[Hicks] dio positivo”, dijo Donald Trump en Fox. “Acabo de hacerme un test y veremos qué pasa”, había añadido.
Así las cosas, no debería sorprender que el demócrata Joe Biden y quienes lo acompañaron se sometan al test de coronavirus. Estuvieron a corta distancia, a unos cuatro metros, del equipo de Donald Trump el día del primer debate presidencial. El proceso electoral estadounidense podría tomar un giro inédito e insospechado.
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