Saludamos y nos sentimos comprometidos con la valerosa lucha de los trabajadores del campo quienes combaten por sus reivindicaciones salariales y mejores condiciones laborales, aún a costa de sus vidas e integridad personal. Que derrotaron al fantasma del miedo manipulado por los dueños del capital para presentarlos como terroristas y acallarlos. Que con su actitud firme y ejemplaridad han levantado la bandera de la esperanza en la transformación económica, social y política en el Perú.
Saludamos también a la juventud que lucha y proclama desde las calles su rebelión contra el sistema actual, agotado y corrompido. Los jóvenes se han sublevado con entusiasmo y coraje alzándose en multitudinarias protestas por el logro de una sociedad con nuevos valores libertarios e igualitarios, en contra del orden establecido, la falta de trabajo y la injusticia económica. Su rebelión, que dejó dos muertos y numerosos heridos, sigue en pie y marca el punto de partida de la emergencia de una ola de cambio y esperanza.
Los sucesos que vivimos son parte de una protesta nacional e internacional que surge desde la miseria y la explotación por el fracaso de un modelo aristocrático de sociedad que beneficia a quienes son dueños del capital y se convierten así en nuevos aristócratas con poder absoluto. De esta forma abandonan a los trabajadores y a sus familias a quienes dejan en condición de siervos.
Alertamos a todos los sectores de que con esta situación se abren las puertas de una mayor confrontación social y política que perjudicaría a todos los peruanos, debido a la arrogancia de una aristocracia neoliberal que se niega a mirar más allá de sus privilegios.
Como anuncio los jóvenes escriben en los muros sus percepciones sobre la situación actual y los cambios que vienen:
• “Mira mas allá de tus privilegios”
• “Regalan miedo para vendernos seguridad y lo pagamos con libertad”.
•”El gobierno no me representa”
Gustavo Saberbein Chevalier.
Celula aprista de Chicago, IL, EUA.
Chicago, 4 de diciembre de 2020.