De acuerdo a datos oficiales, la actividad industrial del gigante planetario se contrajo en septiembre por primera vez en 18 meses, desde en febrero de 2020, cuando el confinamiento decretado para hacer frente a la pandemia de la Covid-19 ralentizó la dinámica económica del país.
Importantes y mayores restricciones en el uso de la electricidad y los elevados precios de los insumos se encuentran entre los principales causales de la contracción mostrada por el sector industrial chino, una dinámica que difiere a la sector servicios que ha vuelto a expandirse.
La contracción industrial se da a conocer al mismo tiempo que se han producido una serie de apagones en el país y el temor creciente suscitada por la situación del sector inmobiliario.
De acuerdo a la Oficina Nacional de Estadísticas, es el Índice de Gestores de Compras (PMI, en siglas en inglés), un indicador importante del sector manufacturero de China el que ha dado la señal de alerta de la contracción, este cayó del 50,1 en agosto al 49,6 en septiembre. Pues si este índice arroja cualquier cifra inferior a 50 implica una contracción de la actividad; si es mayor a 50, crecimiento.