Lunes 13 de mayo 2024 | Contáctenos
Al menos 24 insurgentes murieron en los ataques de los talibanes contra dos bases de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), en los que también perdieron la vida cuatro uniformados, según informó la OTAN.
Un comunicado de la ISAF indicó que sus tropas habían rechazado dos ataques fallidos contra bases en la provincia de Khost después de que fueran objeto de “disparos indirectos y de armas pequeñas”.
Los talibanes atacaron las bases operativas avanzadas de Salero y Chapman, añadió la ISAF, precisando que “la mayoría de los asaltantes resultaron muertos en el exterior de las bases, pero dos insurgentes lograron romper el perímetro de seguridad y penetrar en el interior de la base de Salerno”.
Quince insurgentes resultaron muertos cerca de Salerno, seis cerca de Chapman y tres -entre ellos un comandante- durante un bombardeo aéreo cuando se retiraban a bordo de un vehículo, según la ISAF. Cuatro de los fallecidos portaban chalecos cargados con explosivos y otros cinco fueron detenidos.
Siete agentes de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) murieron víctimas de un atacante suicida que se inmoló dentro de la base Chapman en diciembre pasado, el segundo hecho más letal en la historia de la agencia.
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