Destilando sensualidad. La modelo paraguaya Larissa Riquelme viene haciendo locuras en la TV mexicana, al punto de dejarse tocar los senos por el conductor del programa "Es de noche y ya llegué".
Lejos de estar dispuesta a pasar al olvido como la novia del mundial, la morocha decidió reanudar la polémica y protagonizó una serie de entrevistas en las que se la “jugó” y se dejó tocar sus “senos”, y se besó con el controvertido conductor René Franco.
Larissa Riquelme ya no sabe qué hacer para seguir estirando sus cinco minutos de fama. Antes había realizado una serie de desnudos en Paraguay y México.