Ya van siete días desde que los camiones de basura no pasan por las calles ni avenidas del distrito del Rímac.
Al parecer, el alcalde Víctor Leyton, al no salir reelegido, se olvidó del Rímac y de sus vecinos. Es un secreto a voces, que el burgomaestre utilizó al personal municipal para su campaña política, prometiendo el oro y el moro, como en cualquier elección municipal.
Pero al no salir re electo, volteó la cara y ha despedido a varios trabajadores, además le debe más de dos meses el pago a los trabajadores de limpieza. Algunos señalaron que no hay para la gasolina de los camiones.
Pero, lamentablemente no todo es culpa del alcalde, ya que sólo el 50% de los vecinos paga los arbitrios. El resto no lo hace y exigen que la comuna esté impecable. Los mismos vecinos no colaboran con la limpieza.
El alcalde electo, Enrique Peramás, que actualmente es regidor en el Rímac, señaló que se acordó en el consejo municipal, que se pedirá la colaboración de la región Callao para recoger los residuos sólidos y restituir el presupuesto destinado a dicha tarea.
“En el transcurso de hoy y mañana esperamos que el servicio de limpieza está regularizado y podamos recoger toda la basura acumulada”, comentó Peramás.
Agregó que se evaluará la posibilidad de adquirir maquinarias para la limpieza pública con un “fondo de modernización” que el municipio recibió del gobierno Central.
“El problema va a continuar en la medida que no se destinen los recursos necesarios. Le hemos dicho al alcalde Leyton que no puede descuidar la limpieza pública”, agregó el candidato elegido.
Esperemos, que este nuevo alcalde del distrito tradicional del Rímac, haga algo por recuperar el centro histórico, por acabar con la delincuencia de la zona y se cumpla con el recojo de la basura.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo envió un comunicado al alcalde Leyton exhortándolo a que se inicie con el acopio de la basura para evitar una epidemia en el distrito.