Debido a las innumerables críticas que forzaban a los homosexuales y lesbianas a ocultar su orientación sexual en el ejército, el presidente estadounidense Barack Obama derogó la polémica ley “Don’t ask, don’t tell” (No preguntes, no cuentes) que prácticamente los expulsaba de la institución.
“Su país necesita de ustedes, su país los llama y nos sentiremos honrados de recibirlos en las filas del mejor Ejército del mundo”, dijo Obama, según recoge el portal Momento 24.
El secretario de Defensa y jefe de Estado Mayor, almirante Miker Mullen, dijo que la nueva reglamentación no comprometerá “el nivel de preparación de las Fuerzas Armadas, su eficacia, la cohesión de las unidades y el reclutamiento”.