Saná.- La ola de protestas a favor de la democracia continúa expandiéndose en Medio Oriente. Después de Túnez y Egipto, ahora le ha tocado el turno del empobrecido Yemen.
Miles de personas han salido a las calles de Saná para pedir al presidente del país, Ali Abdalá Saleh, no se presente a una nueva reelección.
“No a la reelección, no a la sucesión”, coreaban los alrededor de 10,000 participantes en una de las cuatro concentraciones, celebrada cerca de la Universidad de Yemen, en el centro de Saná.
Los manifestantes reclamaron que en sus más de 30 años en el poder Abdalá no ha podido combatir la pobreza y declararon su admiración por la “Revolución de los Jazmines” que alejó del poder al presidente tunecino Ben Alí.