Santiago.- Como bien dijo un periodista chileno: Chayanne es un “obrero del corazón”. Y ha sido por esa capacidad de encandilar con su voz y su baile lo que hizo dominar ayer al “monstruo” de la Quinta Vergara que se volvió apenas un “minino” con el que hizo y deshizo durante su show.
En un espectáculo de más de 90 minutos el boricua demostró por qué es uno de los reyes de la música latinoamericana que lo ha llevado a presentarse ya en ocho ocasiones en el festival viñamarino, igualando el récord de Miguel Bosé.
“No todas las noches uno tiene la oportunidad de presentarse en un escenario como este, que me ha visto crecer”, dijo el también bailarín antes de despachar una batería de himnos como Tu pirata soy yo, Fiesta en América y Tiempo de vals, además de temas más bailables como Salomé y Torero
Con casi 30 años de carrera artística el cantante ha demostrado que su energía no ha disminuido sino que, por el contrario, inyecta a la audiencia las ganas de bailar y cantar hasta el extremo.
Fue por eso que más de 15,000 personas en el auditorio al aire libre de la Quinta Vergara exigió a los organizadores no solo darle las dos antorchas –una de plata y otra de oro–, y una Gaviota de Plata, sino también la Gaviota de Oro, que es el máximo galardón que puede aspirar un artista en el festival musical más importante de América Latina.