La radioactividad en el agua de Tokio se mantiene por tercer día consecutivo en niveles seguros para su consumo, así lo informaron autoridades japonesas.
Las mediciones de la planta depuradora de Kanamachi, detectaron 34 becquerel de yodo radiactivo por kilo, a diferencia de los 210 becquerel por kilo que se registraron el anterior miércoles en ese lugar.
Aunque el nivel de radiación en el agua descendió, la preocupación de la población continúa por la fuga radiactiva en la central nuclear de Fukushima.